¿Roomba se derrumba? No parece ser su punto de vista. El fabricante de los robots aspiradores Roomba, iRobot, se declaró en bancarrota el pasado 14 de diciembre, bajo el Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos. En el comunicado señaló que transferirá su negocio a dos empresas chinas y que dejará de cotizar en bolsa. La compañía, con sede en Massachusetts, explicó que ha llegado a un acuerdo de reestructuración por el cual iRobot será adquirida por su principal prestamista y fabricante, Shenzhen Picea Robotics Co. y Santrum Hong Kong Co. "El anuncio de hoy marca un hito fundamental para asegurar el futuro a largo plazo de iRobot", declaró en un comunicado Gary Cohen, director ejecutivo de iRobot. Según Cohen, la transacción fortalecerá su posición financiera y "garantizará la continuidad para sus consumidores, clientes y socios". Según los términos del acuerdo de bancarrota, iRobot continuará operando sin que se prevean interrupciones para sus clientes.
Tras la aprobación judicial de la transacción, iRobot espera estar mejor posicionado para ejecutar su estrategia de innovación a largo plazo bajo la propiedad de Picea. De hecho, ellos se ven "Emergiendo más fuerte bajo la nueva propiedad". Una vez completada la transacción, iRobot será una empresa privada propiedad al 100% de Picea, y sus acciones ordinarias dejarán de cotizar en la bolsa. El mercado de valores Nasdaq LLCo cualquier otra bolsa de valores nacional. La transacción busca generar un balance más estable y una mayor capacidad para invertir en su próxima generación de robots, innovaciones en hogares inteligentes y mejoras en la experiencia del cliente. iRobot espera que los tenedores de acciones comunes no reciban ningún capital de la compañía reorganizada, y que todos los intereses de capital emitidos y en circulación sean cancelados y los tenedores de acciones comunes experimentarán una pérdida total y no recibirán recuperación de su inversión.
Según publicó Alimarket Electro, en los últimos resultados financieros relativos a los nueve primeros meses de 2025, iRobot reflejaba una caída estrepitosa en ventas, o lo que es lo mismo 270 M$ menos de facturación en este periodo, y que solo en 3Q han bajado 50 M$. iRobot ya afirmó en febrero que tenía serias dudas sobre su viabilidad en los siguientes 12 meses, y ya han pasado 10. Avanzando que si no lograba nuevos fondos o una nueva ampliación de su crédito más allá del 1 de diciembre, podría recortar sensiblemente o poner fin a sus operaciones. Cabe recordar que la empresa ya ha ampliado seis veces el periodo de vencimiento de su crédito, la última, como ya hemos dicho, hasta el 1 de diciembre de 2025. Detrás de toda esta delicada situación se encuentra el fracaso de su posible compra por parte de Amazon, que dejó a iRobot en una situación financiera crítica.
