El puerto de Cádiz ha iniciado las obras de construcción de su futura nueva terminal de contenedores, con los trabajos de dragado de la zona sobre la que se cimentarán los cajones de hormigón que conformarán el nuevo muelle. Dentro de esta fase inicial, se encuentra, además, el desmantelamiento de los duques de alba que existen en la zona, tras el cual quedará expedita el área de trabajo y operaciones de la nueva infraestructura portuaria.

Como se recordará, la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) adjudicó a la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada al 50% por ACCIONA y FCC la construcción de la terminal, un proyecto estratégico para la reordenación e impulso de las actividad portuaria de la ciudad. La nueva terminal se ubicará entre el dique de Levante y el muelle número 5 de Navantia y el plazo de ejecución previsto es de tres años y medio.

El proyecto cuenta con un presupuesto de adjudicación de 90 M€ -con una cofinanciación de 60 M de Fondos FEDER de la Unión Europea- y comprende, en esta primera fase, el desarrollo de una nueva terminal con una superficie de 22 ha, una longitud de muelle de 590 m, un dique de abrigo de 320 m y un calado de 16 m.

El desarrollo de esta infraestructura persigue un triple objetivo. Por un lado, la potenciación del tráfico de contenedores; por otro, la consolidación del puerto como motor de desarrollo socioeconómico y, finalmente, la reordenación de los tráficos. A tal respecto, la infraestructura posibilitará el traslado del actual tráfico de contenedores a unas instalaciones habilitadas con mayores equipamientos y servicios y con una ubicación que evita tráfico pesado por el centro de la ciudad y que separa el uso de pasajeros y de mercancías de dentro de la zona portuaria. Asimismo, ampliará la superficie de depósito y permitirá el atraque de buques de mayores dimensiones, al aumentar hasta 16 m el calado, frente a los 10,5 m con los que cuentan la zona de contenedores actual.