El Consejo de Administración de Pescanova ha elegido la oferta presentada por el consorcio formado por Damm, KKR, Luxempart y Ergon como "la más adecuada para dirigir el proceso de reestructuración y asegurar la viabilidad futura de Pescanova".

La oferta capitaneada por Damm se ha impuesto a las otras cuatro, impulsadas por distintos fondos de inversión. En conjunto, el consorcio ha propuesto aportar 250 M€ al capital de Pescanova, cubriendo la totalidad de las necesidades de capital de la compañía. A cambio tomarían una participación del 51% en el accionariado de la compañía, previsiblemente en una operación acordeón que reduciría el capital actual a cero, El resto de las acciones de la empresa corresponderían a la banca, que habrá de asumir una quita importante, del orden del 70-80%, capitalizando el resto de la deuda. Uno de los factores decisivos para la elección de esta oferta ha sido el apoyo de la banca española, principal acreedora de Pescanova.

Ahora, los miembros del consorcio y el consejo de administración anuncian que iniciarán "inmediatamente las conversaciones con los acreedores financieros más relevantes con la finalidad de alcanzar un acuerdo sobre un convenio de acreedores". El calendario habrá de acelerarse, además, para evitar la liquidación de las filiales del grupo en Chile. En este sentido, ya existe un acuerdo entre Pescanova y el síndico del proceso de quiebra de PescaChile para aplazar cualquier decisión sobre la liquidación de la filial chilena hasta la materialización definitiva de los acuerdos de recapitalización del grupo, proceso que en ningún caso se debería extender más allá de uno o dos meses.