Las huertas y las cubiertas fotovoltaicos son algunas de las soluciones utilizadas hasta ahora por los distribuidores para rentabilizar el espacio baldío de sus tejados. La cadena británica Tesco ha ido un paso más allá al anunciar que está considerando un plan para explotar los ‘derechos urbanísticos del aire’ de al menos quince establecimientos para construir viviendas prefabricadas. El plan, que también considera el espacio excedente de varios aparcamientos, puede reportar cerca de 400 MGBP (unos 470 M€) al grupo.

La iniciativa forma parte de un paquete de medidas para rentabilizar sus activos inmobiliarios y que también ha puesto en marcha acuerdos ‘shop-in-shop’ con enseñas ajenas a la alimentación, como ropa (Arcadia) o productos de salud (‘Holland & Barretts’).