Conservas y Frutas (Cofrusa) ha solicitado la liquidación en el Juzgado Mercantil número dos de Murcia. La conservera de Mula (Murcia) toma esta decisión ante la imposibilidad de renaudar la actividad industrial, sin que ningún inversor hasta la fecha se haya interesado por reflotar el negocio.

Ya el pasado mes de agosto, como ha podido confirmar Alimarket, no pudo iniciar la campaña de melocotón, quizás el principal producto para la compañía en términos de volumen. Cofrusa se había mantenido a flote en los últimos años gracias a las ventas realizadas en el exterior, donde tenía como principal cliente a Princess Foods.

Cortadas las líneas de financiación desde que entrase en concurso, la liquidez de la histórica conservera dependía de los pagos realizados por sus clientes foráneos. De ahí que en repetidas ocasiones los empleados se encontraran con retrasos en los pagos de las nóminas una vez finalizadas las campañas.

Ahora, sus 69 empleados en plantilla, que acaban de finalizar un ERE temporal de tres meses, cuentan con un permiso laboral retribuido de dos semanas, según han indicado los sindicatos. Además de esos trabajadores, otros 250 empleados fijos discontinuos trabajan en campaña para la empresa murciana.

Superado el concurso de acreedores en febrero de 2014, Cofrusa había cumplido en 2017 con el tercer pago establecido en el convenio, un acuerdo que contemplaba una quita del 50% sin devengo de intereses de los créditos ordinarios y una espera de once años.

En esta nueva etapa, su plan estratégico tenía como objetivo transformar una empresa históricamente conservera en una compañía de alimentación, enfocada al consumidor y preparada para poner en el mercado los productos que demandan los nuevos hábitos de consumo.

La compañía afrontó todos estos retos tras recuperar buena parte del terreno perdido en los últimos años a causa del concurso. En concreto, según datos del Registro Mercantil, alcanzó una facturación en 2016 -último con datos públicos- de 42,61 M€, un 7,7% más que en el ejercicio anterior y casi 13 M€ más que en 2011, año en el que sus ventas tocaron suelo. Además, obtuvo un beneficio de explotación de unos 355.000 €, frente a las pérdidas de 316.444 € soportadas en el ejercicio anterior. Por otro lado, su fondo de maniobra también estaba en positivo, cerca de 860.000 € hasta suponer el 2% de su cifra de negocios.

En el plano industrial, como recogió la compañía en su última memoria, las inversiones realizadas en activos productivos en sus instalaciones de la localidad murciana de Mula fueron mínimas, debido al esfuerzo adicional que suponía atender los pagos establecidos en el convenio. En 2017, tercer año del calendario pactado, Cofrusa debía satisfacer un 10% del crédito descontado.