Los centros tecnológicos Azti y Neiker han unido fuerzas para llevar a cabo un proyecto de investigación conjunto bautizado como '3SLEKA'. Este nace con el objetivo de impulsar el consumo de proteínas alternativas de origen vegetal entre la población de edad más avanzada y cumplir con las estrictas regulaciones agrícolas europeas, que exigen reducir el uso de productos químicos en los cultivos, obligando a buscar soluciones más sostenibles.
Para alcanzar este objetivo, se ha puesto el foco en las legumbres debido a su alto contenido proteico, de fibra y de micronutrientes, además de que, según la OMS, disminuyen el riesgo de enfermedades asociadas con la alimentación, como la obesidad y la diabetes mellitus tipo 2.
El trabajo de ambos agentes ha dado como resultado tres nuevos ingredientes que unen nutrición y sabor desarrollados a partir de los excedentes del cultivo, sin agroquímicos como fertilizantes o fitosanitarios, de garbanzos y alubias. En concreto, han creado harinas, snacks y untables con propiedades nutricionales mejoradas y adaptadas a las necesidades de las personas mayores.
Según el comunicado, para el sector agroalimentario, esta iniciativa representa una oportunidad para valorizar cultivos locales, reducir desperdicios y mejorar la trazabilidad y seguridad alimentaria. “Aprovechamos leguminosas infrautilizadas, como garbanzos y alubias, para crear alimentos innovadores, saludables y respetuosos con el medioambiente. También conseguimos mejorar la seguridad alimentaria, garantizando que no haya residuos peligrosos en los productos finales”, destaca Clara Talens, investigadora de AZTI y responsable del proyecto.
Además de los nuevos ingredientes, el trabajo conjunto realizado en la iniciativa, financiada por el Departamento de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca del Gobierno Vasco, también ha conseguido desarrollar metodologías avanzadas para identificar y controlar residuos fitosanitarios y modelos predictivos para optimizar la estructura y textura de los alimentos.