Cuando se cumplen diez años de la puesta en marcha de la planta de productos sin gluten de Esparreguera (Barcelona), Grupo Gallo ha hecho público sus números como elaboradora de pastas dirigidas a la población celíaca o con intolerancias.
En concreto, desde la firma indican que produjo más de 2.500 t de pastas sin gluten el pasado año, lo que supuso un 10% más que en el ejercicio precedente. Esta gama alcanza los 31 productos, incluyendo desde pastas tradicionales y de legumbres y, también, su línea de caldos (que suma siete referencias). Según datos de consultoras aportados por Gallo, su cuota de mercado en el sector sin gluten es del 37,2%, con un crecimiento del +18% en el último año, reafirmándose como líder en esta categoría.
En 2024, el segmento de pasta sin gluten alcanzó un valor estimado de 11 M€, con previsión de llegar a los 12 M en este ejercicio y casi 29 M en 2030. Se estima que en España hay entre 450.000 y 900.000 personas celiacas, aunque cerca del 80% aún no está diagnosticado, de acuerdo con la prevalencia estimada por la Federación de Asociaciones de Celíacos de España (FACE). Dentro del colectivo adulto, el 75 % de los casos son mujeres, con un pico de incidencia en torno a los 30 años. Además, aproximadamente un 6 % de la población española podría presentar sensibilidad al gluten, una condición que pese a ser diferente, también es relevante a la hora de medir consumo de productos sin gluten.
Gallo comercializa pastas sin gluten desde 2004, pero fue en 2015 cuando adaptó el centro de Esparreguera para dedicarlo por completo a la fabricación de estas variedades, garantizando así la seguridad alimentaria y minimizando el riesgo de contaminación cruzada. Además, gracias a un control exhaustivo del proceso productivo, en 2017, la marca obtuvo la certificación bajo el Sistema de Licencia Europeo (ELS) o “Marca Registrada Espiga Barrada”, que garantiza que sus productos cumplen con los requisitos más exigentes para personas celiacas. La compañía realiza el desarrollo de productos sin gluten en colaboración directa con el colectivo celiaco a través de sesiones de cata y recogida de opiniones.





