Pese al crecimiento que la marca de distribuidor ha protagonizado en los últimos años, la marca de fabricante continúa siendo un pilar fundamental en el sector del gran consumo. Tal y como apuntan desde Promarca, estas aportan el 7,5% del PIB español, generan más de 1.377.000 empleos directos y contribuyen con más de 13.000 M€ anuales en impuestos, lo que las convierte en un pilar fundamental para el desarrollo del sector. Pero, para lograr el mantenimiento de su posición, desde la asociación consideran imprescindible que se mantenga la inversión en innovación. En su opinión, "la innovación no solo garantiza la libertad de elección del consumidor, que espera productos cada vez más adaptados a sus necesidades, más saludables, sostenibles y que simplifiquen su día a día; también dinamiza las categorías y asegura un crecimiento sostenido para toda la economía".

Aunque el sector de Gran Consumo en España ha demostrado su resiliencia, con un crecimiento del 3,5% acumulado hasta agosto de 2025, para mantener y acelerar este ritmo, la innovación es un factor indispensable. De hecho, según los datos del ‘Radar de la Innovación 2024’ de Wordpanel by Numerator, la innovación de las Marcas de Fabricante es un potente generador de negocio incremental, es decir, de ventas nuevas que no canibalizan las existentes. En 2024, el negocio incremental generado por estas innovaciones (MDF) fue del 65%, lo que demuestra su capacidad para expandir el mercado y aportar valor añadido a toda la cadena. Además, este incremento no solo beneficia a los fabricantes, sino que también contribuye significativamente a la distribución, generando un 44% de incrementalidad para el retail. Este valor añadido, sumado a la capacidad de crear oportunidades y satisfacer nuevas demandas, convierten a la innovación en el verdadero motor de crecimiento y competitividad para el Gran Consumo español.

"La innovación es fundamental para evitar el estancamiento del mercado y asegurar su crecimiento", afirma Fernando Fernández Soriano, presidente de Promarca. "Al introducir productos nuevos y relevantes, se genera interés, se satisfacen nuevas necesidades y se impulsa la vitalidad de todo el sector, beneficiando sobre todo, a los consumidores, además de a fabricantes y distribuidores”.

Conscientes de la importancia de seguir innovando, las marcas de fabricante invierten más de 520 M€ anuales en I+D, no solo para enriquecer la oferta para el consumidor, sino también para aportar un valor añadido al mercado. Y es que el impacto de la innovación de las Marcas de Fabricante va mucho más allá del lineal. Muchas tienen un impacto directo en la salud y la calidad de vida de los consumidores. De hecho, el ‘Radar de la Innovación 2024’ revela que entre los lanzamientos de este año predominan los productos relacionados con la salud y el bienestar: bebidas sin alcohol, helados sin azúcar, alimentos funcionales, etc.

Sin embargo, el volumen de innovación ha experimentado un descenso del 48-50% desde 2010, alcanzando mínimos históricos, una situación que supone un reto clave para el sector: reactivar la innovación para desbloquear su máximo potencial y evitar un escenario de pérdida de valor para toda la cadena.

Por todo ello, desde Promarca se propone un espacio de diálogo constructivo y estratégico que reúna a la administración pública, fabricantes y distribuidores; y que tendrá como objetivo identificar las mejores prácticas y diseñar soluciones conjuntas para impulsar un ecosistema más favorable para la creación, lanzamiento y distribución de nuevos productos. En 2024, la innovación contribuyó con un valor incremental del 70% para los fabricantes y del 56% para los distribuidores.