Assignia Infraestructuras ha llevado a cabo las obras de conversión del Castillo de Lorca en Parador , poniendo en valor un recinto de enorme importancia histórica como punto de encuentro de la cultura islámica, judía y cristiana, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 1931. El parador, de 13.625 m2 de superficie, se ha levantado sobre un espacio declarado Bien de Interés Cultural y de gran valor histórico. Durante su construcción se descubrió un yacimiento arqueológico con restos de las tres culturas (islámica, judía y cristiana) que representó un importante reto: excavación, documentación, conservación y, finalmente, integración de los restos en el proyecto arquitectónico y constructivo.

El resultado de la obra, que ha supuesto una inversión total de 37,5 M€ , es un edificio moderno, respetuoso con el medio ambiente y el entorno monumental y, sobre todo, seguro al cumplir las normas de la construcción antisísmica.