El 80% de los instaladores madrileños están en contra de las prácticas contra la cadena de valor, según el I Informe de la Profesión Instaladora “El instalador en 2018” elaborado por APIEM (Asociación Profesional de Empresarios de Instalaciones Eléctricas y de Telecomunicaciones de Madrid) con la colaboración de Telematel, compañía experta en soluciones de software y contenidos digitales para empresas de obras y servicios, distribuidoras y fabricantes de materiales.
“80 de cada 100 empresas instaladoras consultadas no aprueban la venta directa al instalador o la guerra de precios porque considera que ataca a la cadena de valor”, asegura Fede de Gispert, director de Marketing de Telematel y coordinador del informe. Asimismo, el 54% de los consultados aseguran que el principal criterio para sus compras es el de la calidad muy por encima del precio (20%), de la garantía de los productos (15%) y de la marca (10%).
Solo un 6% de los instaladores de la Comunidad de Madrid cree que uno de los retos del sector es el impulso a la digitalización. El instalador usa Internet, pero lo prefiere en actividades que faciliten sus dinámicas de trabajo actuales, no las transformacionales”, asegura Fede de Gispert. Los datos revelan también que este sentimiento digital va muy unido a la generación a la que pertenecen. "El 11% de los encuestados sí piden formación en nuevas tecnologías y el 39%, que podríamos llamar pragmáticos, corresponden a la primera generación digital, que tiene página web de empresa y relaciones vía e-mail, así como que hacen uso básico y no intrusivo de las tecnologías”, según de Gispert. Por último, el 35% de los instaladores forma parte de la generación “papel”, que el estudio denomina “Conservadores”, que gestiona el trabajo como hace 10 y 20 años (folletos y catálogos en papel, visitas, etc.).
Según este informe, el 88% de los instaladores madrileños consultados aseguran que el intrusimo es el principal problema al que se enfrenta el colectivo. Del mismo modo, el 52% de los encuestados cree que la morosidad es un gran reto para el sector y el 47% indica lo mismo respecto a las pocas ayudas institucionales. Le siguen la falta de cualificación y de aprendices (31%) y el fraude fiscal (25%) como otros de los importantes desafíos.
En la Comunidad de Madrid existen 1.995 empresas instaladoras con casi 32.000 empleados, lo que supone el 27% del total de instaladoras eléctricas de España.
