Ampliación del Aeropuerto de Barajas

Una obra de altos vuelos

Se espera que la ampliación del aeropuerto de Barajas, con una inversión de
6.200 M. y seis años de trabajos, permita una mayor puntualidad, incremente
el número de operaciones y reduzca el tiempo de espera.

El proyecto de la ampliación del Aeropuerto de Madrid-Barajas se divide en
dos actuaciones, la Nueva Area Terminal (NAT) y la ampliación del espacio
de vuelo. La NAT contempla varias actuaciones paralelas: la construcción
del nuevo edificio Terminal, el edificio Satélite, aparcamiento y accesos,
un sistema automatizado de tratamiento de equipajes (SATE), un sistema de
transporte de pasajeros intra-terminales (APM-INTRA) y el desvío y
soterramiento de la M-111, entre otras. Mientras, la ampliación del nuevo
campo de vuelo ha supuesto la construcción de dos nueva pistas, zonas de
rodadura, áreas de movimiento y diversos sistemas asociados. El edificio
Terminal, pieza principal que articula la NAT, dispone de una superficie
total de 470.261 m2 distribuidos en seis niveles, tres sobre rasante para
la facturación y los otros tres situados subterráneos, destinados al
mantenimiento, tratamiento de equipajes y lanzadera entre terminales.
Cuenta con tres bloques diferenciados a través de “cañones”, que permiten
la entrada de luz natural al interior. El Terminal está concebido
transversalmente como una estructura diáfana de hormigón armado sobre la
que se sitúa una cubierta sandwich de aluminio de doble curvatura.
Mientras, la fachada sobre el nivel +1 es un muro cortina de doble vidrio y
cámara aislante, que cuelga de la cubierta, y el nivel de plataforma es un
panel de aluminio ondulado. Todos estos elementos dotan al edificio de un
aspecto futurista, amplio y luminoso. La NAT cuenta además con un segundo
edificio, de similares características arquitectónicas que el principal y
con una superficie de 286.984 m2. La comunicación entre ambas edificaciones
se realiza a través del nuevo sistema de transporte APM-INTRA, que contará
con un total de 19 vehículos guiados sin conductor que cubrirá una
distancia de 2.100 m2 y estará operativo las 24 horas. Además del nuevo
sistema de transporte intraterminal, el nuevo área ha sido equipado con el
Sistema de Tratamiento de Equipajes (SATE) que permitirá el procesamiento
de 16.500 maletas por hora, con una longitud total de 91,3 km. También se
ha instalado un Túnel de Servicos Aeroportuarios (TSA), que unirá el
edificio Terminal y el Satélite y a través del cual se procesarán los
equipajes y el transporte de pasajeros. Las otras dos obras importantes
dentro de la NAT son la construcción del aparcamiento y accesos al
aeropuerto junto con el soterramiento de la M-111. La zona de
estacionamiento contará con un total de 8.885 plazas y superficie de
309.000 m2. Los accesos al nuevo Terminal han sido dispuestos de dos
maneras diferentes: por un lado la comunicación por carretera y, por otro,
las estaciones para tren y metro que están situadas bajo las dársenas. Las
obras realizadas en la M-111 entre los municipios madrileños de Barajas y
Paracuellos del Jarama han supuesto el desvío y soterramiento de un tramo
de carretera, con la construcción de un falso túnel de unos 2.624 m2. El
nuevo tramo, que cuenta con un total de 3.530 m2, tiene capacidad para
6.000 vehículos por hora. Por su parte, la ampliación del espacio de vuelo
del Aeropuerto de Barajas ha conllevado la construcción de dos pistas de
aterrizaje, nuevas zonas de rodadura, áreas de movimientos y diversos
sistemas asociados. Así, el aeropuerto madrileño dispondrá de cuatro pistas
operativas, paralelas dos a dos, que permitirán el aterrizaje o el despegue
de aviones de forma simultánea incluso en situaciones de escasa
visibilidad, al estar equipadas con sistemas de balizamiento
independientes. La primera de las citadas pistas, 18L-36R, cuenta con dos
calles de salida rápida, tres entradas, orientadas a funcionar como calles
de salida en aterrizajes, y dos calles de salida para facilitar el cambio
de sentido. Además, la construcción de esta pista ha supuesto la ejecución
de una plataforma de deshielo y dos plantas separadoras de hidrocarburos.
La otra pista, 15L-33R, que tiene una longitud de 3.500 m. y una anchura de
60 m., dispone de una estructura similar a la anterior. Para el óptimo
funcionamiento del nuevo espacio aéro, se ha dotado a las nuevas pistas con
un sistema de balizamiento independiente entre si y respecto a las dos
pistas ya existentes para facilitar el despegue y aterrizaje simultáneo aún
en situaciones de baja visibilidad. Por último, la ampliación del espacio
aéreo ha conllevado también la construcción de dos nuevas grandes áreas de
estacionamiento y movimiento de aeronaves.

Principales empresas constructoras participantes en la ampliación de
Barajas

Repercusiones del Plan Barajas


Susana Reguera
susana.reguera@alimarket.es
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