La joint venture de telefonía móvil Sony-Ericsson ha registrado unas pérdidas netas de 164 M€ en el tercer trimestre del 2009, una cifra casi siete veces mayor a la que obtuvo en el mismo período de 2008. Las ventas en este periodo cayeron un 4% respecto al segundo trimestre hasta los 1.619 M€.

Sony-Ericsson achacó esta evolución al descenso de la demanda en el mercado mundial de teléfonos móviles, aunque aseguró que los planes de reestructuración de las operaciones están dando el resultado esperado. La pérdida neta del período julio-septiembre fue menor a la registrada en el trimestre inmediatamente anterior, de 274 M€. El resultado operativo, por actividad ordinaria, fue también negativo y se situó en una pérdida de 193 M€.

La compañía sueco-nipona pronosticó además que el mercado mundial de teléfonos móviles se contraerá un 10% en 2009 debido a la crisis económica mundial y a una menor demanda. Los suministros de Sony-Ericsson aumentaron el 2% con respecto al trimestre anterior, aunque en términos interanuales la bajada fue del 45%.

La cuota de mercado mundial de Sony-Ericsson durante el tercer trimestre se situó en un 5%, según se otorga la multinacional. La compañía incidió en los buenos resultados de su programa de reestructuración, que han contribuido a ahorrar 880 M€ en gastos operativos, y ahora espera que el plan cumpla sus objetivos a mediados de 2010.

"Nuestro negocio en el tercer trimestre muestra la contribución del programa de transformación. Ahora estamos mejor posicionados para presentar nuevos productos, como el Aino y Satio, en los siguientes tres meses", indicó Dick Komiyama, presidente saliente de la compañía.

Junto con la presentación de resultados se confirmó que el presidente de Sony Corporation, Howard Stringer, será el nuevo consejero delegado, mientras que Komiyama, hasta ahora presidente de Sony-Ericcson, cederá su puesto a Bert Nordberg.