Scyse , Staib Comunicaciones y Servicios Empresariales, recibía en el verano un regalo inesperado como es la representación de 'SodaStream', un producto que ya se comercializa a nivel mundial con éxito. Cabe señalar que éste es el tercer intento de los propietarios por entrar en nuestro mercado con su máquina, aunque es también la primera ocasión en la que se comunica con fuerza su lanzamiento y, desde Scyse, se reconoce la importancia de este negocio en su organización. El caso es que era Di4 la compañía encargada de la distribución de 'SodaStream' desde septiembre de 2010 hasta el pasado mes de julio, momento en el que la israelí Soda-Club Group, propietaria de las patentes y encargada de desarrollar el producto decidía cambiar de socio en España. Y aquí es cuando se ponen en contacto con Scyse, quienes ya trabajan en su catálogo con una marca asimismo de titularidad israelí como es 'Homedics'. En esta nueva etapa, 'SodaStream' se puede adquirir en los centros de El Corte Inglés, algunas tiendas ' Media Markt ' y ' Darty '; y próximamente en los puntos de la cadena Activa Hogar . En general, el dispositivo está teniendo especial buena acogida en zonas de residencia de población extranjera (arco mediterráneo y Canarias), que ya conocen el sistema de sus países de origen. La gama en España cuenta con dos modelos (89,9 € y 139,9 €), y la serie especial 'Gold', disponible por tiempo limitado y cuyo PVP llega a 390 €. La máquina funciona con un sistema mecánico de pulsaciones que, gracias a una carga de CO2, gasifica el agua de la botella de PET, añadiéndole a continuación la dosis con el sabor deseado. Los cilindros de CO2 son producidos para ser usados con las máquinas y pueden dar lugar entre 60 y 80 litros de agua con gas. Una vez gastado, el cliente puede devolver el envase vacío a la tienda intercambiándolo por uno lleno. Cada botella de sabores de 500 ml equivale a 12 litros de refresco. Las botellas de PET son reutilizables, y actualmente hay 12 sabores en el mercado español, aunque en otros países se ofrecen hasta 150 variedades y cinco tipos de máquinas. Desde Scyse se destaca su valor ecológico por el ahorro que supone en botellas y latas, al igual que su capacidad de encajar en todo tipo de hogares. 'SodaStream' es la gran apuesta de Scyse de cara a la próxima campaña de Navidad.

Scyse, que experimentó un crecimiento en sus ventas del 30% en el pasado 2010 llegando a los 6,2 M€, reparte su actividad al 50% entre sus divisiones de marketing promocional y marcas representadas. En este último negocio, la empresa destaca la buena marcha de 'Homedics' (bienestar y estilo de vida saludable), 'Rio' (belleza), y 'Labs' (estaciones meteorológicas). Pero su catálogo se completa con depiladoras 'Epilady', básculas y termómetros 'Salter', audio 'HMDX', purificadores 'Andrea' y 'Coway', accesorios para hogar y oficina 'Stadler Form' y 'PowerMat', y PAE de 'Cloer'.

Un proyecto que arranca en 2009

La comercialización de 'SodaStream', como se dice al comienzo de la noticia, ya se intentó de forma infructuosa en abril de 2009 a través de la empresa Empire Scandinavia , S.L. La entidad, puesta en marcha a finales de noviembre-2008, había previsto arrancar su periplo con el lanzamiento inicial de tres modelos, con PVPs de 99, 119 y 229 € (una versión más lujosa). En aquel momento, su comercialización venía avalada por su presencia en 30 países, destacando Alemania y Gran Bretaña. En Italia se introdujo en julio-08 cosechando según los responsables de la empresa unos buenos resultados (se vende en unos 1.200 puntos de venta). Decir que la puesta en marcha del proyecto en aquel momento corrió a cargo, a partes iguales, de la sueca Empire, AB, licenciataria de la marca para los países nórdicos y bálticos, y de la israelí Soda-Club Group, propietaria de las patentes y encargada de desarrollar el producto. Hasta hace unos años, la trayectoria de la marca “Sodastream” discurrió por diferentes senderos no siempre favorables. Aunque la creación de marca (y del dispositivo) data de 1903 (se trata de un invento de George Gilbey), gozó de gran popularidad en los años ochenta. Ya en 1985 Cadbury Schweppes la adquiriría y tras un largo periodo de ostracismo en 1997 se la vendería, en una operación de management buy out, a Graphite Capital.