El Grupo Iberpapel, especializado en la producción de celulosa y de papeles de impresión y escritura y con instalaciones productivas en Hernani (Guipúzcoa), a través de la filial Papelera Guipuzcoana de Zicuñaga, ha anunciado unas inversiones de 180 M€, de los que 130 M€ corresponderán a la instalación de una máquina de fabricación de papeles MG, con la que efectuará su entrada en el sector del packaging. Y es que, según a señalado el presidente de la compañía, Íñigo Echevarría Canales, en la presentación corporativa de este proyecto, "la estrategia del grupo es dirigirse a nuevos sectores con un futuro de crecimiento muy superior al de la impresión y escritura, y con un claro mayor valor añadido", como es el caso de los papeles MG.

La denominada MP5 tendrá una capacidad estimada de unas 85.000 t anuales, lo que supondrá un aumento de la producción papelera de la compañía superior al 40%, y contará con un cilindro-secador 'Yankee'. Los papeles MG ('machine glazed') tienen múltiples aplicaciones, entre las que destacan la confección de bolsas de boutique, papel regalo, bolsas para el pan, paquetería, papel para pintores o interleaving (papel que se inserta entre rollos de acero inoxidable).

El denominado 'Proyecto Hernani', cuyo desarrollo está supeditado al traslado de una línea de alta tensión que cruza la parcela en la que se ubicarán las nuevas instalaciones y cuya tramitación se encuentra en un estado muy avanzado, tendrá una ejecución prevista de entre 24 y 30 meses, de manera que podría estar operativo para finales de 2019.

Inversión para la planta de celulosa

Los 50 M€ restantes de inversión que completan el 'Proyecto Hernani' irán dirigidos a la reforma y modernización de la actual planta de celulosa de eucalipto, en la que se incorporarán mejoras tecnológicas y medioambientales ('MTDs' y se aumentará su capacidad de producción entre un 10% y un 15%, de manera que ésta pasará de las 200.000 t actuales a las 220.000-230.000 t.

Los activos del grupo pertenecientes a la división industrial se completan con la referida fábrica de papel para impresión y escritura, dotada con 250.000 t de capacidad, sendas plantas de cogeneración por biomasa, de 20 MW y 50 MW de potencia instalada. Además cuenta con una división forestal propietaria de 11.220 ha de eucalipto en Uruguay, 8.943 ha en Argentina y 6.117 ha. en España, para un total de 25.830 ha.

Iberpapel considera que dispone de una posición financiera consolidada para iniciar este proyecto. En este sentido, al término del primer trimestre de 2017 dispone de una caja neta de 62 M€, así como de pólizas de crédito no dispuestas por un importe de 41 M€ con vencimientos en diciembre de 2020 y primeros meses de 2021. El patrimonio neto de la compañía asciende a 228,3 M€.

Iberpapel cerró el ejercicio de 2016 con una bajada del 7,5% en sus ingresos consolidados, hasta los 201,9 M€; pero subidas del 13,0% en ebitda, situado en 36,6 M€, y del 24,8% en beneficio neto, que fue de 20,1 M€. Por áreas de actividad, 164,6 M€ de facturación procedieron de la venta de papel (-6,1%), 31,3 M€ de electricidad (-15,4%) y 6,0 M€ de madera (-0,5%). La plantilla media del grupo ascendió en el ejercicio a 296 personas.