Mercedes Hortal, directora de ITENE Madrid, ha abierto el III Encuentro Alimarket Soluciones de Envasado para Gran Consumo, que este año gira en torno a los ejes de innovación y sostenibilidad. La responsable del Instituto Tecnológico ha centrado su ponencia en el complejo proceso de innovación que deben afrontar las empresas antes de poner en el mercado con éxito un nuevo desarrollo en el lineal. “Actualmente, el 90% de las innovaciones fracasan, por lo que innovar por innovar sale caro”, afirma la directora.
En buena parte de los casos, las compañías consiguen un desarrollo técnico adecuado, pero posteriormente se encuentran con problemas de escalabilidad y de lanzamiento al mercado. Tal vez, según explica la directiva, el producto ha salido demasiado pronto a la venta, “ya que no hemos considerado el mercado al que vamos dirigidos ni el modelo de negocio que vamos a seguir”.
Para llevar a cabo con éxito este proceso, la responsable de ITENE ha dado una serie de claves ineludibles para cualquier compañía. Entre ellas figuran la elaboración de un plan exhaustivo para conocer el mercado potencial (cifras de crecimiento, competidores y restricciones legales); el conocimiento de las demandas de los consumidores, cada vez mejor informados y más preocupados por los productos saludables; y el desarrollo de un producto “que mejore los existentes en el mercado”.
Tras este estudio, Mercedes Hortal señala que hay que establecer un plan de ruta (basado en el modelo Campas) para prever el target al que va dirigido, elegir el canal adecuado para su comercialización, concretar la relación con los clientes y ofrecer una propuesta clara de valor. Todo ello significa que cualquier proceso de innovación tiene que trasladarse a algo que sea operativo, de manera que se garantice la transición desde la industrialización hasta la fase de lanzamiento al mercado . “Ideas sin acción es una alucinación”, concluye la directiva. Por lo que respecta a casos de éxito, la responsable de ITENE ha repasado las ventajas del envase activo, que permite alargar la vida útil del producto, concretamente una semana sin alterar la calidad, mejorar la gestión del stock y reducir mermas.
