La alemana KHS y el grupo canadiense especializado en inyección Husky han presentado 'Factor 100', un nuevo envase de PET que se ha mostrado en la última Drinktec y que se da a conocer como la botella más ligera que hay en el mercado, al pesar sólo 5 g. El envase dispone de una capacidad de 500 ml y, según destacan ambas compañías, este desarrollo reduce en un tercio el peso mínimo que había hasta el momento para este tipo de formatos.

Su diseño ha sido adaptado específicamente con el objetivo de darle el mejor agarre posible y la máxima estabilidad. El PET se distribuye de una forma "extremadamente precisa" gracias a los sistemas técnicos "de vanguardia" que se han utilizado tanto en el moldeo por inyección de la preforma como en la moldeadora por soplado.

Esto permite optimizar al máximo el uso del material, utilizando más o menos según la zona de la botella. Además, se reduce considerablemente la huella de carbono, lo que viene a satisfacer las demandas de aquellos consumidores más concienciados con el envasado sostenible. La huella ambiental se reduce hasta en un 30% gracias a la utilización de menos material y menos energía durante la fabricación, sin que el rendimiento del envase se vea afectado en ningún aspecto.

La reducción en el peso de las botellas de PET es uno de los asuntos que más preocupa a la industria ya que el 70% de los costes de fabricación de estos envases son atribuidos a los materiales que se utilizan. Según ha explicado KHS, la compañía no solo ostenta el récord de ligereza en botellas para aguas no carbonatadas. También tiene en su catálogo botellas de PET con una tapa de rosca para bebidas altamente carbonatadas que pesan 9,9 g (0,5 l) y 23,3 g (1,5 l).