Grupo Vidrala ha formalizado, con fecha de 1 de diciembre, la venta de su actividad de fabricación de envases de vidrio en Ghlin (Bélgica), desarrollada a través de las filiales MD Verre y Omega Immobilière et Financière, al grupo francés Saverglass, dando cumplimiento así el preacuerdo alcanzado entre ambas partes el pasado 10 de octubre. El precio pagado por la transacción asciende al simbólico valor de 2 €. Adicionalmente, Vidrala conservará la propiedad de todo el producto terminado fabricado en la planta hasta la fecha de cierre, así como de algunos otros elementos productivos, como moldes utilizables en otras plantas del Grupo.

La transacción también incluye la formalización de un acuerdo de suministro en virtud del cual Vidrala adquirirá parte de la producción de la planta belga durante un período de cinco años, garantizando de esta forma el servicio al cliente a medida que se desarrolla el plan inversor para el reemplazo de capacidades productivas actualmente en marcha dentro del Grupo, que absorberá unos 500 M€ en el próximo lustro, y estará principalmente focalizado en producir tiradas largas y en aquellas plantas del grupo consideradas más rentables, como las británicas o las portuguesas.

El impacto final de la desinversión belga en el resultado consolidado de la Sociedad se detallará en los estados financieros correspondientes al ejercicio 2019. De manera preliminar, se estima que generará una pérdida no operativa por enajenación de activos de aproximadamente 5 M€.

Según señala la compañía, la venta de la actividad manufacturera en Bélgica se enmarca en la estrategia de Vidrala de "focalizarse en centros productivos que sean competitivos y estratégicos asegurando una óptima asignación de capital a lo largo del negocio. La desinversión permitirá la ejecución de los proyectos de inversión que han sido selectivamente definidos con el objetivo de optimizar el servicio al cliente y de acuerdo con la marcada ambición industrial de largo plazo del grupo".

En esta estrategia no encajarían los altos costes de la factoría belga, que, en cambio si lo harían en la órbita de un grupo especializado en envases de alto valor añadido para vinos y espirituosos, como Saverglass, amén de resultar compatible geográficamente. La fábrica belga, situada a apenas 10 km de la frontera con Francia, mercado al que dirige la mayor parte de sus ventas, fue adquirida por Vidrala en 2007 por 27,7 M€, deuda incluida. El ejercicio previo había facturado 46,2 M€, con ebitda de 5,1 M. En 2013, Vidrala destinó 15 M€ a la modernización del más pequeño de sus dos hornos.

En 2018, Vidrala logró unas ventas consolidadas de 955,4 M€, un 16,1% más que el año anterior de manera global y 3,8% de manera orgánica, sin contar el efecto de la incorporación de Santos Barosa al perímetro de consolidación del grupo. Savarglass, por su parte, con tres centros de producción en Francia (en Feuquièrs, Arques y Le Havre), uno en México (Acaltán de Juárez, Jalisco) y otro en Emiratos Árabes (Ras Al Haimah), facturó 464 M€ en 2018, la mitad por exportaciones a un centenar de mercados, entre ellos el español.