La firma de jamón curado Ramón Ventulà, con sede central en La Canya (Girona), ha instalado una nueva línea de loncheado y envasado de jamón curado del grupo GEA La compañía tiene 4 plantas productivas y elabora más de 5.000 t de producto al año en 90 referencias distintas incluyendo jamón curado, tocino, fuet o chorizo, contando con más de 750 formatos de envasado. Exporta además a 70 países.

La firma se equipó con tres termoformadoras ‘PowerPak’ de GEA en 2019 y decidió actualizar ahora otros equipos más antiguos. La directora general de la empresa, Pilar Ventulà, asegura que elaborar y comercializar los productos cárnicos y embutidos tradicionales comienza "con la selección de las materias primas de mejor calidad y luego unirlas en un proceso meticuloso. Esto requiere que empleemos tecnología de proceso precisa y confiable".

Por parte de GEA, Norbert Brunnquell, gerente senior de Productos de Corte y Carga de GEA, explica que "cada parte de la línea se combina y sincroniza perfectamente entre sí para crear un proceso continuo que sea eficiente, seguro y sostenible para el medio ambiente en el mercado actual".

Gea aconsejó a su cliente el uso de la nueva ‘GEA DualSlicer II 1200’ junto con la línea de termoformado. La línea completa emplea la tecnología ‘GEA OptiScan’ para comprobar la largura, grosor y forma de cada loncha antes de su envasado, con objeto de mejorar el peso de cada envase y tener un mayor control de calidad con el mínimo residuo. En su conjunto el contrato entre ambas partes se valoró por encima del millón de euros.

El proceso de colocación del interleaver se realiza a alta velocidad. Con dos unidades de película separadas, la máquina de cortar puede procesar cada registro de forma independiente, incluso si los productos son diferentes. El film se coloca entre cada loncha en el proceso de corte del producto facilitando después al consumidor separar el producto. El sistema de carga automática ‘ShingleLoader 600’ proporciona un flujo continuo de producto a la termoformadora. También permite que los productos se superpongan dentro del paquete para crear un envase atractivo en las estanterías reduciendo el tamaño de los paquetes generales para minimizar el uso de materiales plásticos y aprovechar al máximo el espacio comercial disponible.