La papelera Lecta ha invertido en una caldera de combustible derivado de residuos (RDF) para su fábrica de papel Condat, en Francia, que estará terminada a mediados de 2024 y que contribuye a sus objetivos de sostenibilidad. El proyecto se basa en una economía circular, ya que la empresa recogerá los residuos con alto contenido biogénico que se utilizarán como combustible de fuentes locales, lo que ayudará a reducir el volumen de residuos que actualmente no se pueden recuperar y que, de lo contrario, terminarían en los vertederos.

En cuanto a la energía, la nueva caldera cubrirá alrededor del 50% de las necesidades de vapor de la planta, lo que redunda en un incremento de su competitividad, porque la generación de vapor será mucho menos costosa que con gas natural, a la prq ue reducirá las emisiones de CO2 relacionadas con el gas en un total de 55.000 toneladas por año. La financiación del proyecto ha sido asignada a Kyotherm, uno de los líderes en el sector de proyectos de calor renovable en Europa, que financiará hasta 45 M€ de un CAPEX total del proyecto de 56 M. El cierre del acuerdo de financiación firmado está previsto que se produzca durante el primer trimestre de 2023 tras cumplirse una serie de condiciones precedentes.

En relación a sus objetivos de sostenibilidad, Lecta ha informado que los datos de 2021 y del primer semestre de 2022 "confirman la mejora de los valores de los principales parámetros ambientales". En concreto, "el porcentaje de compra de celulosa certificada, así como los valores del caudal vertido de agua, de la calidad del agua (DQO o Demanda Química de Oxígeno) y del consumo energético muestran una mejora significativa", explica la compañía, que pone en valor el incremento de compra de celulosa (+20% respecto a 2020) procedente de plantaciones forestales certificadas (PEFC y FSC).

También parámetros como el caudal vertido de agua, la calidad del agua devuelta a la naturaleza (DQO) y el consumo de energía (vinculados al proceso de fabricación y muy sensibles a los paros y a la producción global de cada fábrica) han experimentado una mejora de entre el 5% y el 9%. Además, Lecta ha implantado estándar ISO 50001:2018 en todas las fábricas para reducir progresivamente el consumo energético por tonelada de papel producida.

Lecta está integrada por la italiana Cartiere del Garda, la francesa Condat y la española Torraspapel, con una plantilla de casi 3.000 trabajadores repartidos en siete fábricas en Europa. En los primeros seis meses del ejercicio en curso los ingresos de Lecta ascendieron a 1.007 M€, frente a los 581,5 M del mismo periodo del año anterior, mientras que su ebitda ha pasado de 21,1 M a 121,8 M€ en este mismo tramo.