Vidrala sortea las presiones inflacionistas derivadas de las distorsiones en los mercados energéticos europeos provocadas por la guerra de Ucrania alcanzando una cifra récord de negocio de 1.347 M€. La recuperación de los márgenes operativos de la compañía fruto de acciones internas de mitigación de los costes energéticos le llevaron a obtener un beneficio neto que se acerca al techo histórico logrado en 2020.
