El hotel de 4E 'Vincci Capitol', explotado en alquiler por la cadena Vincci y situado en el número 41 de la Gran Vía, en Madrid, encima de los cines del mismo nombre, ha reforzado su capacidad alojativa al tiempo que apuesta por la tematización cinematográfica, con la inauguración de tres nuevas habitaciones. La ampliación, llevada a cabo por la propietaria tanto del hotel como de los cines, la sociedad Daellos, ha supuesto pasar de 136 a 139 estancias y ha supuesto el aprovechamiento del patio de luces, justo por encima de la sala de cine, en las plantas cuarta, quinta y sexta. Así, las nuevas habitaciones, totalmente insonorizadas, se denominan respectivamente 'Fila 4', 'Fila 5 y 'Fila 6'. La primera de ellas, de categoría junior suite, pasa a ser la más grande del hotel, con 55,44 m2, y consta de salón con barra, dormitorio y baño. La 'Fila 5' es una suite con una distribución similar a la anterior y cuenta con los mismos servicios y comodidades. Por último, en la sexta planta está la 'Fila 6', una habitación superior que dispone de un alto nivel de servicios y detalles.

Pero lo que hace realmente distinguibles a las nuevas estancias es que están decoradas e inspiradas en el mundo del cine, con grandes murales de artistas como Sofía Loren, Humphrey Bogart, Elvis Presley, Audrey Hepburn, Sean Connery, Marilyn Monroe y Charles Chaplin. Cada uno de estos cuadros está iluminado con un sistema led de colores que va cambiando automáticamente, si el cliente lo desea, con tonos que incluyen el azul, verde, rojo, rosa, blanco y amarillo, para crear así un ambiente más cinematográfico. La decoración de las habitaciones también dispone de otros guiños al mundo del cine, como son unas bobinas antiguas de películas que cuelgan en sus paredes, las cortinas de terciopelo rojo, como si fuera un telón, lámparas de cañón y la alfombra que cubre el suelo de la estancia, repleta de estrellas como si del paseo de la fama se tratase.

En cualquier caso, estos cuartos no son las únicas zonas del hotel de inspiración cinéfila, pues también hay guiños en esta línea en la primera planta, donde se halla un proyector de los años 30 de camino al bar 'Reims'. Por otra parte, el hotel dispone de un acceso privado y casi secreto para el público, por donde acceden los actores en sus días de estreno directamente a la sala del cine.