E l anuncio del presidente estadounidense Barack H. Obama de que levantará las restricciones de los viajes de ciudadanos cubano-estadounidenses a Cuba ha generado expectación entre las cadenas hoteleras españolas implantadas en la isla, ante el negocio que ello podría generar. Se calcula que actualmente viven en Estados Unidos cerca de 1,5 M. de ciudadanos con familiares en Cuba, que hasta ahora veían limitado su desplazamiento al país caribeño. Adicionalmente, a raíz de la entrada en vigor de la Ley Helms-Burton, aprobada en 1996 por Bill Clinton, ninguna empresa no norteamericana podría teóricamente comerciar con Cuba bajo amenaza de represalia. Una vez que sea efectivo el fin de las restricciones, los 130.000 viajes anuales que realizan los cubano-estadounidenses a la isla podrían multiplicarse hasta alcanzar las 400.000 entradas. A esta medida se suma la anunciada recientemente por el Gobierno cubano, por la que sus ciudadanos podrán alojarse en hoteles de primera clase y alquilar coches, actividades hasta ahora permitidas a los turistas extranjeros.

Lógicamente, este crecimiento del turismo podrá ser aprovechado por las diez cadenas españolas presentes en Cuba, que representan algo más de la mitad del parque alojativo hotelero del país. En concreto, disponen de 23.412 habitaciones a través de 65 establecimientos, sobre un total superior a las 45.000 habitaciones existentes en toda la isla. Entre las compañías hispanas, destaca claramente Sol Meliá, que por sí sola cuenta con 25 hoteles (10.057 unidades). No obstante, la cadena con mayor número de proyectos es Barceló, que contempla abrir el 'Barceló La Habana' (4E-186) en el segundo semestre de este año, el 'Barceló Cayo Santa María Beach Resort' (5E-2.156) -como continuación del 'Barceló Cayo Santa María Beach' (5E-624), inaugurado en enero pasado-, a lo largo de tres fases entre 2010 y 2012, así como el 'Barceló Flamingo Beach Resort' (5E-776), en Cayo Santa Lucía, previsto ya para 2011. Otros proyectos se sitúan en Varadero y llegarán de la mano de Iberostar y Riu respectivamente con el 'Iberostar Laguna Azul' (5E-814), de inminente inauguración, y el 'Riu Varadero' (5E-1.100), que no se pondrá en marcha hasta el verano de 2010 y supondrá su regreso a la isla después de dejar en abril de 2008 la gestión del 'Riu Turquesa' (4E-268), en Varadero, que, por cierto, al poco asumió Oasis como 'Oasis Turquesa'.

En cuanto a las más recientes aperturas, éstas han llegado especialmente de la mano de Hoteles C, que incorporó a principios de 2009 tres establecimientos en gestión, tras alcanzar un acuerdo con la estatal Cubanacan. Nos referimos al 'Tropicoco' (2E-188), en La Habana, 'Santa Lucía' (3E-150), en Camagüey, y 'Aguas Azules' (3E-411), antiguo 'Club Amigo Varadero'. Se trata, en fin, de un movimiento continuo que ya viene siendo la constante en los hoteleros españoles dentro de Cuba y que ahora sólo se espera que pueda acelerarse, porque abrir un nicho de mercado en un momento de crisis como el actual constituye poco menos que un auténtico regalo.