El sector de transporte hortofrutícola se enfrenta a un 2022 de incertidumbre, amenazado por la fuerte subida de sus principales costes, un nuevo estrechamiento de la rentabilidad y la falta de conductores a nivel europeo. A todo ello se suma un incremento de la competitividad y de las operaciones de compra, que vuelven a elevar la concentración en manos de las grandes flotistas del país. Un escenario que, pese a sus dificultades, no ha frenado los desarrollos en materia de digitalización y sostenibilidad, dos de las principales demandas de los clientes a la hora de decantarse por una o otra especialista. El informe analiza la evolución y actualidad del sector, e incluye ranking por ventas específicas de los principales operadores del país, con datos de flota propia y contratada y número de almacenes de todas ellas. También recoge las inversiones previstas en la apertura y ampliación de nuevas instalaciones, además de la relación entre costes y precios de los viajes del transporte frigorífico.