Según el últímo Observatorio del Transporte de Mercancías por Carretera del Ministerio de Fomento, los costes directos han caído en el último año entre un 0,1% y un 0,8% según el tipo de vehículo. Dentro de este informe se analiza caso por caso un total de 15 tipos, que son revisados tanto por costes de tiempo (amortización, financiación o seguros, entre otros) como los relacionados con el kilometraje (combustible, neumáticos, reparaciones o mantenimiento).
Los costes directos de los vehículos frigoríficos articulados son los que mayores descensos han tenido en 2013, cifrados en 0,8%, hasta los 143.539 € (1,2 €/km recorrido). Un 0,7% descendieron por su parte los gastos de los vehículos articulados de carga general (133.718 €), los cisterna articulados de productos pulverulentos (139.274 €), los portavehículos (148.010 €), los trenes de carretera (129.796 €) y los volquetes articulados de graneles (116.220 €). Por su parte, la menor contracción, un 0,1%, la experimentaron los costes de las furgonetas que ascendienden a 49.700 €.
Según este mismo observatorio, los costes directos del transporte de mercancías por carretera experimentaron un fuerte incremento en los años 2000, 2004, 2005, 2007 y primer semestre de 2008. En el segundo semestre de 2008 disminuyeron bastante, mientras que en 2009, 2010 y 211 se incrementaron considerablemente. En el primer trimestre de 2013 se redujeron y en el resto de 2013 se mantuvieron prácticamente constantes. Sea como sea, el principal protagonista en las fuertes variaciones hay que buscarlo en la oscilación del precio del gasóleo.