La Comisión Europea ha ordenado a España recuperar los casi 167 M€ en ayudas estatales concedidas a Correos, tras determinar que la empresa pública se benefició de una compensación excesiva por el servicio postal universal entre 2004 y 2010 y también de exenciones fiscales incompatibles.
Bruselas ha tomado esta decisión tras la investigación en profundidad abierta en febrero de 2016 a raíz de dos denuncias recibidas (realizadas por ASEMPRE -Asociación de Empresas de Reparto y Manipulación de Correspondencia-, y UNO, lobby de la patronal de paquetería) en las que se alegaba que Correos había recibido varias ayudas ilegales e incompatibles los años previos a que el mercado de servicios postales fuese liberalizado en 2011.
De acuerdo con las normas, los Estados miembros pueden conceder ayudas estatales a las empresas para compensarlos por el costo adicional de proporcionar un servicio público, con sujeción a ciertos criterios. En particular, esto requiere que las compañías a quienes se les confía tales servicios no sean compensadas en exceso, algo que, según señala ahora la Comisión, España hizo.
CC.OO. critica "la multa"
Una vez conocida esta situación, el sindicato Comisiones Obreras (CC.OO.) ha rechazado esta devolución de los 167 M€, argumentando que responde a una "interpretación liberal de los servicios públicos por parte de la Comisión Europea y tiene causa en la desidia de los sucesivos gobiernos que durante 20 años no han aprobado el Plan de Prestación del Servicio Postal Universal (SPU) que fije las cuantías para la prestación del Servicio Postal Público que Correos tiene encomendado".
Asimismo, desde el sindicato se ha señalado que "la falta de este Plan y la indefinición del modelo postal están siendo aprovechadas por los lobbies privados para tumbar a la empresa postal pública. Por ello, urge al Gobierno socialista a que ponga en marcha de inmediato el Plan de Prestación del Servicio Postal Universal para asegurar su financiación, mantener la viabilidad de la empresa postal pública y no poner en serios aprietos el mantenimiento de sus casi 60.000 trabajadores/as".
