La multinacional de origen sevillano Persán, especializada en la fabricación de productos para el cuidado del hogar y de la ropa y el cuidado personal, ha inaugurado su nueva planta de botellas en Sevilla. El proyecto, en colaboración con la fabricante de packaging rígido Alpla Ibérica, confirma el compromiso de ambas compañías con un proceso de producción y logística más sostenibles.
En concreto, la fábrica facilita el transporte de botellas de polietileno de alta densidad (PEAD) y polipropileno (PP). “Antes de su desarrollo, los envases recorrían una media de 470 km. Hoy están a escasos 50 m”, apuntan sus responsables. Y añaden, “esta proximidad ha reducido riesgos en la cadena de suministro, disminuido costes, minimizado el impacto ambiental y fortalecido la relación entre las organizaciones”.
Eficiencia y sostenibilidad
La instalación, ubicada junto a la sede de Persán, cuenta con una superficie de 14.000 m2, seis sopladoras con capacidad para producir 53 M de botellas al año y un almacén con espacio para 3.500 palés.
Más allá de la eficiencia, esta planta aporta beneficios desde el punto de vista medioambiental. Su construcción -indican- evita la emisión de 1.222 t de CO₂ al reducir el transporte por carretera en unos 4.500 camiones. Por su parte, el uso de packaging retornable permite eliminar 1.092 t de cartón anuales. Y la instalación de placas solares fotovoltaicas evita la emisión de 336 toneladas de CO₂.
El proyecto, según las mismas fuentes, comenzó su andadura en 2021 y se materializó con las primeras entregas en diciembre de 2023.
Fuertes procesos de inversión
Persán viene acometiendo abultados presupuestos de inversión en los últimos años. Los 35 M€ que ejecutó en 2024 al apartado inversor se destinaron a la modernización y el desarrollo de sus tres centros productivos (Sevilla, Polonia y Francia). Estos mismos absorbieron los 49,09 M€ invertidos un año antes, con especial dedicación a la finalización y puesta en marcha de su nueva planta de Wróblowice, en Polonia, y a la construcción de la citada planta de Sevilla.
Por su parte, el grueso de la inversión que realizó Alpla Ibérica en 2023, y que ascendió a 17,35 M€, se concentró precisamente en el montaje de la planta andaluza, donde cumple funciones ‘in house’. El inmovilizado material de esta sociedad en 2024 fue de 9,34 M€.
El grupo de origen austriaco -uno de los principales fabricantes europeos de envases tanto para alimentación como para non food-, opera en nuestro país a través de cinco plantas: el centro de producción de preformas y botellas de PET en la localidad valenciana de Requena; una factoría de envases de plásticos PEAD y PP en Les Franqueses del Vallés (Barcelona); un centro de producción de botellas de PET y PEAD para cosmética, higiene personal y limpieza en el municipio alicantino de Sax; otro en Noblejas (Toledo), cuya producción está dedicada principalmente a Schreiber Foods; y un ‘in house’ en Montornés del Vallés (Barcelona).
Por su parte, Alpla Ibérica registró en 2024 unos ingresos netos de 156,36 M€, experimentando un crecimiento próximo al 13% con respecto a los 138,54 M€ del año anterior.
Mientras, el grupo español Persán, propiedad de la familia Moya-Yoldi, alcanzó los 862 M€ de facturación en el pasado ejercicio. El líder por facturación del sector de cuidado del hogar y de la ropa en España, según el Informe 2025 del sector publicado por Alimarket, experimentó un crecimiento del 6,3% si se compara con los 810,86 M€ de 2023.
