El grupo farmacéutico Sanofi inauguró ayer oficialmente sus nuevas oficinas en Madrid, en la calle Martínez Villergas, 52, en las que se concentran desde el pasado verano la plantilla de su filial biotecnológica Genzyme y trabajadores de algunos departamentos de la propia Sanofi. La compañía decidió acometer una reforma y ampliación de sus oficinas madrileñas, en las que trabajaban equipos de relaciones institucionales y regulatorio, RSC y parte del equipo de investigación clínica (CSU), entre otras áreas de Sanofi, para acoger a la plantilla de Genzyme (unos 80 trabajadores), radicada hasta entonces en San Sebastián de los Reyes. Con esta inauguración, Sanofi refuerza su posición en la Comunidad de Madrid, en donde emplea a 150 personas y dispone (en Leganés) de su único centro de distribución para toda España. Actualmente, este centro maneja un volumen de 65 M de unidades, con capacidad para 8.000 palets y da empleo a más de 30 personas.

Sanofi mantiene, no obstante, sus oficinas centrales en Barcelona y localiza su única planta de producción en Riells i Viabrea (Girona), tras vender en 2011 su fábrica de sólidos y estériles de Alcorcón (Madrid) a la farmacéutica griega Famar y cerrar su Centro de Investigación Básica en la misma población. Actualmente, Sanofi está invirtiendo en sus instalaciones de Riells cerca de 15 M€ (2011-2014), de los que 5 M se invertirán el próximo año, en ampliar un 12% su capacidad, cpn la intención transferirle la fabricación de tres productos de otras plantas del grupo.

En 2011, Sanofi facturó 667,4 M€ (932,1 M el año anterior), con una plantilla de 1.000 trabajadores.