La empresa de importación y distribución de material médico-sanitario RYPO nació en marzo de 2020, en el momento más duro del confinamiento y la pandemia. Fue entonces cuando el asturiano Gonzalo Díaz y el madrileño Miguel Pascual, dos emprendedores que ya tenían experiencia en el mercado asiático, crearon la compañía para afrontar el desabastecimiento de este tipo de material. Como explica Gonzalo Díaz, CEO y cofundador de RYPO, "el primer pedido que servimos fue a un conjunto de farmacias de Madrid, Asturias y Almería. Concretamente, 50.000 unidades de mascarillas FFP2 que pudimos traer en avión desde Shanghai y distribuirlas en apenas seis días. En ese momento las fábricas chinas tenían stock y pudieron servirnos en el momento, gracias a un contacto de confianza que teníamos en el país”.

RYPO subraya que la rapidez en la respuesta, la aceleración de los tiempos de entrega y la garantía de calidad son las principales características de la compañía, junto a un precio competitivo, que puede ser hasta un 20% inferior al de otros proveedores cuando se trata de compras de grandes volúmenes. El 80% de sus proveedores tienen origen chino.

En concreto, en su primer año en funcionamiento ha servido a 145 entidades: ministerios como el de Agricultura, Pesca y Alimentación y el de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana; gobiernos autonómicos como la Junta de Andalucía, la Junta de Castilla y León o la Generalitat Valenciana; ayuntamientos como los de Palencia, Alcobendas o Pozuelo de Alarcón (los dos últimos en Madrid); universidades como la Politécnica de Madrid o la de Valencia; y hospitales como el Hospital Clínico San Carlos de Madrid, a los que se suman otros organismos, empresas privadas y farmacias de toda España.

En cuanto a productos, en estos doce meses ha importado y distribuido más de 80 M de mascarillas (quirúrgicas, FFP2, FFP2 Infantiles y FFP3); 700.000 cajas de guantes (nitrilo, médicos y de uso civil); 100.000 buzos de protección categoría III; 200.000 litros de hidrogel; 4 M de cubrezapatos; 5 M de jeringuillas, o 200.000 tests rápidos de antígenos, entre otros, que han llegado a 14 de las 17 comunidades autónomas (solo han faltado Cantabria, Navarra y La Rioja) y a la ciudad autónoma de Ceuta. Todo ello le ha permitido alcanzar una facturación de 24 M€.

Además, RYPO colabora con distintas ONGs (Manos Unidas, Educación para la Esperanza, Cáritas, Hijas de la Caridad, Imperial Club Deportivo Fútbol Sala Murcia, Rally Princesa de Asturias, etc.), organizaciones públicas y entidades deportivas, a las que dona material de protección o ayuda con la esponsorización de eventos. En total, ha destinado 100.000 € a estos fines solidarios.

Gonzalo Díaz señala: "queremos que la excelencia sea el principal referente de nuestra actividad, y la perseguimos desde la búsqueda de fabricantes de confianza de los productos que importamos hasta en nuestros propios comerciales y distribuidores, a la hora de prestar el servicio al cliente con la mayor agilidad y en los plazos previstos. Y sobre todo, la excelencia en la calidad de los mismos, que es esencial para este tipo de materiales tan sensibles". Asimismo, para garantizar esa calidad la empresa somete a los productos importados a una triple verificación. Primero se realiza supervisión en origen, para inspeccionar el envío antes de su salida hacia España. Una vez en nuestro país, se entregan muestras a la Asociación de Investigación de la Industria Textil (Aitex), para que las analice en su propio laboratorio de certificación. Por último, Aseconsa, entidad especializada en asesoría sanitaria y de consumo, "asesora a la compañía en el etiquetado y cumplimiento de la regulación vigente y estándares de calidad oportunos".

Tienda online

Por otra parte, la compañía ofrece un servicio de ecommerce para particulares, minoristas y pequeños mayoristas. De esta forma, la tienda online permite la compra de mascarillas, guantes, termómetros, geles hidroalcohólicos, equipos de protección, inyección y punción y tests COVID-19. No obstante, estos últimos solo pueden distribuirse a personal médico o sanitario, ya que está prohibida su venta a particulares.

De cara al futuro, RYPO apuesta "por contribuir a la creación de un mercado justo y competitivo de productos sanitarios, tanto en España como en Europa, así como por la continua búsqueda de alternativas a los productos convencionales, que permitan una mayor sostenibilidad del entorno".