La Congregación de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús ha dado a conocer su próximo proyecto de mejora de la Clínica Psiquiátrica Padre Benito Menni, ubicada en Pamplona. La obra, que ya cuenta con las autorizaciones legales pertinentes, incluye la construcción de un nuevo inmueble, que sustituirá al actual edificio Granada, el más antiguo del complejo. Según detalla la congregación, el nuevo inmueble será "flexible y muy funcional" y estará estructurado en unidades de convivencia integradas por pocos usuarios y con situaciones similares. El bloque conformará un complejo en L con el edificio Dinán, con el que tendrá conexión directa, guardando los dos inmuebles coherencia estética. 

El proyecto incluye un edificio en tres alturas más planta baja, con un área de ocupación de la parcela de 3.223 m2 (un 13,3% menos que el actual edificio Granada), lo que permitirá ampliar la zona de esparcimiento, que alcanzará los 3.333 m2 (2.906 m2 en la actualidad). La superficie construida del nuevo edificio será similar a la de los inmuebles que conforman el bloque Granada, respetando la superficie edificable asignada a la parcela en el Plan Municipal.

El nuevo edificio será más eficiente con intención de reducir el consumo energético. Su disposición permitirá una óptima y racional distribución de las instalaciones lo que, unido a la mejora de la envolvente térmica (fachada ventilada, aislamiento térmico y carpintería exterior), contribuirá a una mayor eficiencia energética. Estas soluciones se traducirán, a su vez, en un mayor confort para el usuario.

Respecto a las características del nuevo edificio, cabe destacar la ampliación de la superficie destinada a habitaciones, que contarán con 2.319 m2, repartidos entre 81 habitaciones (29 de ellas dobles), con un total de 139 camas (103 actualmente). Los nuevos alojamientos se amueblarán y equiparán con materiales y mobiliario adaptados y renovados, buscando soluciones arquitectónicas que mejoren la ventilación, iluminación y privacidad. También crece la zona destinada a estancias comunes, que contará en total con 981 m2. Y respecto a la organización de pacientes, se optará por unidades monográficas de convivencia por patologías.

El proyecto incluye además la habilitación de un nuevo acceso principal para respetar la intimidad de los residentes. Por último, el plan incluye un nuevo salón de actos con más de 160 m2 de salón y 55 m2 de capilla.

En principio, está previsto que las obras tengan una duración total de entre dos años y medio y tres, lo que no significa que hasta finalizar los trabajos no se pueda empezar a utilizar el nuevo edificio. De momento no se ha fijado la fecha concreta de inicio de las obras, cuya primera fase se prevé que se prolongue durante 16 meses desde el comienzo. En esta fase se derribará el edificio situado más próximo al jardín, la cocina y un ala de la residencia de psicogeriatría y se construiría un brazo largo del edificio para incorporar unidades nuevas de habitaciones, zonas comunes y zonas de control y comunicaciones, además de la conexión con el edificio Dinán. En ese momento podrán utilizarse estos primeros servicios, que son los principales. La segunda fase, de unos 14 meses, corresponde a la realización del brazo corto del nuevo edificio, así como el nuevo pabellón de acceso por la Avenida Marcelo Celayeta, la cafetería y el salón de actos y capilla.