Ahora que la economía circular se encuentra en las agendas políticas europeas y que la ciudadanía demanda productos y marcas comprometidas con el medio ambiente, los envases de metal se posicionan como el tipo de envase perfecto para los consumidores europeos", señala la AME.

Esta organización, que está a punto de convertirse en centenaria, reúne a una treintena de empresas de todos los tamaños y tipos de envases metálicos, que mueven una facturación anual que ronda los 2.000 M€. El sector da empleo a 5.000 trabajadores y representa un consumo anual de materia prima, nacional y de importación, superior a las 600.000 t de hojalata y chapa cromada. Se exporta un 21% de la producción, estando sus principales clientes en Europa, destino que aglutina el 90% de las exportaciones.

Una industria que mantiene también una clara apuesta por la innovación, señala la AME, como la reducción en las dos últimas décadas del 33% del peso en los envases de acero y del 28% en los de aluminio. Además, los envases de acero y aluminio poco profundos y con gran abertura pueden ya utilizarse en hornos microondas, lo que abre un abanico de nuevas posibilidades tanto a las marcas como a los consumidores.

Como también se destaca, en la lucha contra el desperdicio alimentario las latas tienen mucho que decir. Su larga vida permite que los productos se mantengan frescos hasta su consumo, permitiendo alargar y preservar las cosechas. Los envases metálicos son un modelo a seguir dentro del nuevo paradigma económico de la economía circular, en donde los productos se reutilizan y reciclan en un círculo continuo que, además, crea puestos de trabajo.

Mientras otros materiales de envasado se degradan en cada ciclo del reciclaje, los productos metálicos se pueden reciclar ilimitadamente sin perder propiedades. Por ejemplo, con 676 latas de bebidas se puede construir una bicicleta y con 126 tapas de metal se puede hacer un terminal de telefonía móvil. Y es que los envases metálicos van todavía más allá del reciclaje: vuelven una y otra vez a ser materia prima para renacer en el mismo o en otro producto.