La pérdida desconocida sigue siendo en España una de las principales preocupaciones de los retailers, con una incidencia del 1,36% en el conjunto de sus ventas en 2013. Para combatirla, tanto distribuidores como especialistas en soluciones antihurto, optan por nuevas tecnologías capaces de disuadir y minimizar el impacto de las sustracciones.
El mercado de protección antihurto se vio en el último año afectado por una ya dilatada coyuntura económica negativa ,que originó un descenso de la inversión en estos sistemas por parte de los distribuidores. Como consecuencia, las seis principales compañías de soluciones para la prevención de la pérdida desconocida que operan en nuestro país redujeron su facturación un 2,8%, hasta totalizar unos ingresos de 110,1 M. Respecto a la estructura del sector, se mantiene la concentración de años anteriores, con un líder, Tyco, que genera tres cuartas partes de las ventas. Si a su actividad sumamos la de su inmediata seguidora, Checkpoint Systems, queda un escaso 6% del mercado para el resto de competidores.
A pesar de la bajada de ventas y de la concentración del sector, las empresas de protección antihurto continúan trabajando en el desarrollo de nuevas soluciones que permitan a los distribuidores optimizar sus inversiones en prevención de la pérdida desconocida. La búsqueda de nuevas tecnologías capaces de proteger los productos con mayor índice de hurto sin que perjudique la experiencia de compra se ha convertido en una de las principales estrategias de las fabricantes, ya que la preocupación por el hurto continúa estando entre las prioridades de los retailers. Según los últimos datos del Barómetro Mundial del Hurto en la Distribución 2013-2014, elaborado por The Smart Cube y el analista Ernie Deyle, en colaboración con Checkpoint, el índice de pérdida desconocida en España equivale al 1,36% de las ventas del sector minorista (1,4% en 2012), lo que supone un valor de 2.574 M€. Estas cifras sitúan a nuestro país como el segundo de Europa, por detrás de Finlandia, mientras, en el conjunto mundial, se sitúa en quinto lugar. Las causas de la pérdida desconocida en España, según el Barómetro, han tendido a diversificarse. Si bien el hurto externo sigue siendo el principal motivo de las pérdidas (30,9%), su incidencia en España disminuyó en comparación con la media europea (38,6%), al igual que el interno, que pasó del 27% al 23,5% sobre las pérdidas. En cambio, aumentó significativamente el fraude de proveedores, que pasó del 5% al 20,6%, y se incrementaron los errores administrativos y factores no relacionados con la delincuencia (del 18% al 25%).
Respecto a las principales tendencias del mercado antihurto, vuelve a predominar la transición de la radio frecuencia (RF) a la identificación por radio frecuencia (RFID), que permite una mejor gestión de inventario y se convierte en paso previo a la gestión de grandes datos en una futura “era del Big Data”. Además de poder acumular en una etiqueta una elevada cantidad de información, el sistema RFID identifica y localiza automáticamente cualquier producto, de forma que los tiempos de las compañías para la reposición de productos se reducen significativamente, acelerando la cadena de abastecimiento. Además, este tipo de etiquetas puede leerse más rápidamente y con mayor precisión, sin necesidad de que el dispositivo lector se encuentre en una dirección de visión directa con ella, con lo que se agiliza el paso por caja.
Otra de las tendencias que se mantienen con respecto al pasado ejercicio es el creciente interés por el etiquetado en origen, como fórmula más segura frente a la pérdida desconocida, además de como mejora de la rentabilidad, ya que reduce el tiempo empleado en tienda para el etiquetado.
Big Data para mejoraR la experiencia de compra
La gestión de grandes volúmenes de información podría abrir una de las vías de especialización del canal minorista. En este sentido, la compañía tecnológica SAP presentó antes del verano las amplias posibilidades que ofrece el Big Data en el sector de la distribución. Según la empresa, el análisis de datos permite descubrir patrones de consumo, de forma que podría mejorarse la experiencia de compra mediante su adaptación a las necesidades del consumidor, para ofrecerle un valor añadido más allá del precio. La personalización de la oferta, proponiendo al cliente listas de la compra predeterminadas en función de las últimas adquisiciones realizadas en el establecimiento; presentar ofertas o recomendaciones de productos similares a los que habitualmente adquiere e incluso optimizar las ofertas de los establecimientos con el análisis en tiempo real del espacio físico de la tienda y los movimientos que el cliente realiza dentro de ella, son algunas de las actuaciones que podrían llevarse a cabo con esta tecnología.
El primero en dar un paso hacia el análisis de datos ha sido el grupo Tyco. Así, el pasado mes de agosto, su matriz anunciaba una inversión, de importe no revelado, en la compañía RetailNext, ubicada en California (Estados Unidos) y especializada en soluciones de Big Data para minoristas. Como consecuencia, Tyco lanzará nuevas funcionalidades de análisis e inteligencia de tráfico en tienda que facilitarán a los retailers la monitorización, análisis y actuación sobre el comportamiento de los compradores en el entorno del establecimiento. La combinación de los dispositivos de control de tráfico y una plataforma avanzada de análisis posibilitará capturar e interpretar métricas clave para optimizar sus operaciones y fomentar las ventas. La nueva solución que presentará Tyco aprovechará la infraestructura de video existente para recoger y analizar datos en tiempo real.
Entretanto, este 2014, la compañía ha centrado su esfuerzo, según indica, en lanzar “nuevos productos específicos y servicios que van más allá de la mera seguridad, buscando ofrecer valor añadido como la mejora de la gestión del negocio, mediante servicios remotos e integración ideados para ayudar a nuestros clientes a reducir costes y sacar el máximo rendimiento de su inversión en seguridad”. Fruto de ello, ha presentado nuevas soluciones VST ILI (inteligencia a nivel de artículo o visibilidad de inventario), que combinan la protección antihurto acustomagnética (AM) con la tecnología RFID en una misma etiqueta dura de doble uso, como la nueva gama de etiquetas ‘Sensormatic’ para tapones de botella de vino y licores. Además, ha lanzado un desactivador portátil para alarmas acustomagnéticas durante el proceso de escaneo del código de barras, con lo que proporciona mayor rapidez a las transacciones y reduce las falsas alarmas en puerta en un 50% de los casos. Finalmente, ha rediseñado la etiqueta dura VST ‘AM Ultra·Max’ para que sea reutilizable. Respecto a su cartera de clientes, este año ha incorporado a la misma parte de la red de supermercados ‘masymas’, a través de la distribuidora alicantina Sucesores de Pedro Soriano Buforn. Así, ha instalado en 35 puntos de venta ‘masymas’ distribuidos por las provincias de Alicante y Valencia el sistema ‘Ultraexit’ en las salidas de los establecimientos, junto a los pedestales ‘AMS-1090’. Para la desactivación, se ha optado por ‘Sensormatic AMB-5010’, para el escaneo y desactivación de los artículos protegidos con etiquetas EAS en una sola acción. Finalmente, en lo que respecta a las etiquetas se han utilizado los modelos ‘Miniultrastrip III’ (etiqueta adhesiva de tecnología acustomagnética) y ‘UltraTag botella’. Además, ha alcanzado acuerdos con el grupo Inditex; la cadena minorista estadounidense Macy’s, la británica Asda y la cadena de telecomunicaciones Phone House.
Checkpoint Systems amplía su oferta
También Checkpoint Systems, que absorbe cerca del 20% del mercado nacional, ha detectado la transición hacia las antenas duales (antihurto y RFID), por lo que ha incluido, entre sus lanzamientos, productos que combinan ambas tecnologías. Entre ellas, la antena ‘Evolve Exclusive E-10’, diseñada para favorecer el cambio hacia la RFID a partir de las soluciones ya existentes. Estas antenas disponen de paneles personalizables con la incorporación de publicidad, dentro de una inclinación de los retailers a integrar los sistemas antihurto en la actividad del establecimiento. De ahí que, también, se prefieran etiquetas de menor tamaño y que no interfieran en la compra del consumidor pero que, a su vez, sirvan de elemento disuasorio.
Entre otras novedades de la firma destaca la línea ‘EVOLVE iRange’, que se compone de seis antenas con un sistema que detecta inhibidores de frecuencia, activando la alarma si se produce la entrada de los mismos en la tienda. Puede utilizarse con las nuevas etiquetas ‘Micro’, caracterizadas por su reducido tamaño. Por último, la solución ‘Counterpoint iD’ ofrece una desactivación de alta velocidad para etiquetas y tags de todos los tamaños, además de tener un menor consumo energético. Para los productos electrónicos con mayor riesgo de hurto, la compañía ha desarrollado la solución Atlas, de diseño discreto. En lo que queda de año, tiene previsto ampliar su oferta con el desacoplador digital ‘S3verify’, dotado de una codificación inviolable, que queda inhabilitado para su funcionamiento en caso de hurto.
Por otra parte, Checkpoint prosigue su apuesta por el etiquetado en origen, de manera que los productos llegan a la tienda protegidos y facilita la reposición en los lineales. Para fomentar esta línea de productos, la firma ha cerrado diversos acuerdos este año. Por un lado, inició una colaboración con la fabricante de envases plásticos para la industria alimentaria Viduca, por la que las etiquetas antihurto de la primera se aplican en origen en los envases plásticos de esta última. Por otra, presentó, junto a la especialista en sistemas de pesaje y etiquetaje automático Bizerba, un servicio integral ante empresas representantes de la industria cárnica y retailers internacionales para implementar el etiquetado en origen, adecuándose al nuevo Reglamento de la Unión Europea 1169/2011. En opinión de Flavio Musci, director de ventas de etiquetado en origen de Europa de Chekpoint, “la industria cárnica está optando progresivamente por el etiquetado en origen de la mano de los minoristas para proteger mejor los artículos frente al hurto, tener mejor trazabilidad y suministrar una experiencia de compra idónea, con toda la información de la etiqueta exigible por la ley visible en el envase”. Asimismo, ha cerrado diversos acuerdos con las compañías norteamericanas Mojix y RGIS, para el desarrollo de soluciones de principio a fin que permitan optimizar las operaciones en tienda y la ejecución de programas de venta multicanal y la incorporación en los comercios minoristas de una solución conjunta de gestión de inventario basada en RFID.
Entre las últimas instalaciones realizadas por Checkpoint en el sector de distribución alimentaria, destaca la realizada en la cadena italiana de hipermercados Bennet. En nuestro país, el pasado octubre se sumó a su portafolio la distribuidora Labrandero, especializada en productos hotorfrutícolas y delicatessen, con dos puntos de venta en Majadahonda (Madrid), a la que ha dotado de antenas, etiquetas y collarines específicos para botellas de vino y aceites selectos.
Nuevas líneas de negocio
Ante la coyuntura económica, la valenciana Sidep España optó por la modificación de su estrategia comercial, dando prioridad a los supermercados, a los que suministra de una línea de etiquetas de seguridad adhesivas, carcasas ajustables para cosmética y otros complementos de protección. Tras iniciar su incursión en el exterior, con contratos puntuales en Guinea, este año se ha centrado en el mercado nacional, en el que está introduciendo novedades y continúa ofreciendo “a clientes de tamaño medio” su “oferta de equipamiento económico, que comprende antenas antihurto, etiquetaje de seguridad y complementos, circuitos cerrados de televisión (CCTV) y cajas fuertes”. La diversificación es para Sidep una de las vías de crecimiento, por lo que, en junio, abría una nueva línea de negocio, al iniciar la comercialización del catálogo de carcasas de seguridad de la compañía italiana Blucom (Necchi), con la que llegó a un acuerdo para la comercialización de sus productos en el mercado español. En total, introdujo más de 70 referencias para proteger conservas de alto precio y productos de perfumería y cosmética, destacando los ‘safers’ ajustables que ahorran espacio en el expositor y los protectores de pilas y baterías en blíster. Además, entre 2013 y 2014, realizará un desembolso de 130.000 € para el desarrollo de productos y mejora de su equipo comercial. Fruto de ello, lanzó en octubre una nueva versión de su etiqueta ‘Sabiotag’, protectora de botellas de vino y licores, caracterizada por ser adaptable prácticamente al 100% de las botellas. En el éxito de su comercialización confía la compañía, que ha recibido, según comenta, muestras de interés por parte de algunos distribuidores europeos. Ya en este mes de noviembre, presentará una nueva línea, denominada ‘Centinel’, para la protección de productos multimedia, resultado del acuerdo alcanzado con Century Europa-antigua MW Trading, de origen sueco, integrada actualmente en el grupo chino Century Hangzhou- para la distribución en España y Portugal. Finalmente, tiene en fase de pruebas un cierre especial para etiquetas rígidas de textil que podría ver la luz a finales de año o principios de 2015.
Gunnebo progresa en España
El grupo sueco Gunnebo, que opera en España a través de la filial Gateway Loss Prevention, ha logrado, en tan sólo tres años, hacerse un hueco en el mercado nacional de soluciones antihurto. Para este 2014, su filial tiene previsto facturar 2 M€, lo que supondría un ascenso del 42,8%. A este volumen, la sueca añade en torno a 3,5 M que ingresa su filial Gateway Portugal, con lo que su negocio en el mercado ibérico supera los 5 M. Según la propia empresa, su éxito radica en su “apuesta por mantener una plantilla propia lo más ajustada y flexible posible para evitar costes fijos innecesarios, que luego se trasladan a los precios finales; ofrecer favorables condiciones a nuestra red de partners para una gestión de servicios ágil, rápida y eficaz y una atención personalizada al cliente”.
En el último año, la compañía ha realizado inversiones por valor de 250.000 €, dirigidas al desarrollo de nuevas soluciones de protección electrónica de artículos (EAS, por su siglas en inglés), con impacto directo especialmente en la tecnología acustomagnética. En esta línea, ha lanzado la gama ‘AM Store Protect’ con mayores prestaciones, menor coste y consumo de energía por antena y con posibilidad de acceso remoto para optimizar el servicio de asistencia técnica y ofrecer al cliente un valor añadido para una rápida resolución de incidencias técnicas en tiempo real. Para 2015, también prevé nuevos desembolsos, enfocados principalmente a la gama RF.
En opinión de la empresa, existe en el mercado una “dualidad de gamas EAS”. Por un lado, “soluciones tipo low cost, que ofrecen una protección más básica y mínima pero con un coste muy ajustado, y una gama de alto rendimiento para entornos más exigentes”. Su posicionamiento, según fuentes de la misma, se encuentra en “ofrecer alto rendimiento a costes cercanos al concepto low cost”. Entre los proyectos para el próximo año, Gateway trabaja en completar su gama EAS, además de potenciar sus soluciones complementarias como ‘Software de Análisis Inteligente’ para la reducción de pérdidas asociadas a transacciones en el pago (TPV/entorno checkout). Entre ellas, destacan las soluciones ‘XBR’ para las transacciones realizadas a través del TPV y ‘StopLift’, para el control de las transacciones no realizadas por falta de escaneo (ya sea por errores operacionales o por fraude interno, o externo en los casos de los sistemas de autopago o ‘self-checkouts’).
Finalmente, una de las compañías que venía operando en el sector cesaba actividad en primavera, tras ser declarada en concurso voluntario. Se trata de la barcelonesa Repromatic Trade, que disponía de sistemas de radiofrecuencia, tanto RFID como acustomagnéticos, además de sistemas de etiquetaje electrónico gráfico. Según indicó la propia empresa antes del cese, la falta de liquidez estaba causada por impagos de grandes proyectos realizados. En 2013, su último ejercicio, había reducido significativamente su cifra de negocio, al facturar 1,5 M, frente a los 2,39 M de 2012 y sus pérdidas se habían duplicado hasta superar los 550.000 €.