La acción-consecuencia de a mayor crisis y dificultades económicas, incremento del hurto, se está cumpliendo claramente en España. Según el ‘Barómetro Mundial del Hurto en la Distribución’, que elabora anualmente el británico ‘Centre for Retail Research’ en colaboración con la especialista en seguridad Checkpoint, en el último periodo auditado (julio de 2010-junio de 2011) el índice de pérdida desconocida sobre ventas se situó en el 1,4%, volviendo a los niveles de 2000/2001. Precisamente, desde ese año las empresas de distribución han invertido algo más de 6.000 M€ en dispositivos antihurto en España, pasando de los 400 M anuales en el inicio de la década a los cerca de 800 M de los últimos ejercicios. La subida del índice de la pérdida desconocida sobre ventas es todavía más grave si tenemos en cuenta que los márgenes en la distribución han disminuido, los operadores tratan de reducir al máximo los costes superfluos y asisten a la caída progresiva del consumo.
De hecho, en el último ‘Barómetro’ las empresas de distribución que participaron declararon unos ingresos de 25.014 M€ sobre 7.562 establecimientos, un 19,2% menos frente a los 30.966 M y 5.960 tiendas del periodo precedente. Es decir, más hurto y menos ventas en un contexto en el que las rentabilidades se examinan con lupa. Si nos centramos en el hurto externo (por parte de los clientes) e interno (propios empleados), la pérdida desconocida alcanzó los 2.946 M€ en el último tramo auditado, con un incremento de un 9,8% respecto al precedente. Si a estos hurtos le añadimos los cometidos por los proveedores y los posibles errores administrativos, los costes de la delicuencia subirían hasta los 3.268 M, frente a los 3.036 M de 2009/2010. La “culpabilidad” de este volumen de pérdida desconocida se reparte entre el hurto externo (49,6%), interno (29,4%), proveedores (5,4%) y errores administrativos o contables (15,6%).
Descenso de las inversiones
Con estos datos, España se ha convertido en el cuarto país del mundo en el que más ha aumentado el hurto, al mismo nivel que Grecia y sólo superada por la República Checa, Irlanda y Rusia. En cualquier caso, los niveles en nuestro país son muy similares a los de la media europea, tanto en hurto sobre ventas como en el incremento de la pérdida desconocida en el último año. Este contexto de caldo de cultivo propicio para el hurto, ha coincidido con un leve descenso de las inversiones en seguridad en España por parte de los operadores. Éstos destinaron 782 M€ en 2010/2011 en diferentes medidas y sistemas, frente a los 784 M del periodo anterior. En contraposición, según el Centre for Retail Research, los 50 principales minoristas, ya a nivel mundial, que fueron objeto de menos hurto en 2010/2011 habían aumentado su inversión un 11%. De estos retailers, además de haber incrementado el gasto en prevención casi el doble que la media, el 96% contaba con auditorías para supervisar las políticas de seguridad aplicadas por su empresa.
En España, el sector de antihurto y dispositivos de protección electrónica de artículos (EAS) está dominado claramente por los gigantes Checkpoint Systems y Tyco International (‘Sensormatic’ y ‘ADT’), cada uno máximo exponente de las tecnologías de radiofrecuencia y acustomagnética, respectivamente. En el mercado de la distribución alimentaria, Checkpoint se atribuye una cuota de alrededor de un 90%, ya que prácticamente la totalidad de los operadores, salvo Dia, utiliza su tecnología. Las minoristas más activas en los últimos meses están siendo las regionales, que están adoptando las medidas que ya habían desarrollado los grandes de la distribución. Además, recientemente Checkpoint llegó a un acuerdo con Lidl, para empezar a equipar sus centros a nivel europeo. Curiosamente, los dos grandes del hard discount, las alemanas Lidl y Aldi, no contaban hasta ahora con sistemas de protección antihurto.
La estrategia comercial de Checkpoint se ha centrado en los últimos años en ofrecer soluciones que permitan al retailer “vender más y perder menos”, con desarrollos, por ejemplo, para la mejor gestión del tiempo del cliente al hacer la compra o para ampliar el número de productos que se pueden colocar en libre tocado con menor riesgo de hurto. En lo que respecta al primer punto, la multinacional norteamericana lanzó a mediados de este año el sistema denominado “Turn-O-Matic Pro”, para intentar evitar colas en los establecimientos minoristas. Al llegar al mostrador, utilizando una pantalla táctil, los clientes reciben un ticket numerado que indica su turno. En lugar de verse obligados a esperar en la cola, son libres para pasear por la tienda hasta que su número se anuncie en varios displays visuales colocados por el centro. Además de mejorar la experiencia de compra, este sistema permite a los propietarios gestionar sus tiendas de forma más eficiente, obteniendo datos como el número de clientes en espera, la duranción del tiempo de atención a los mismos o los servicios de mayor demanda en cada momento.
Checkpoint ya ha dado pasos significativos hacia estas soluciones inteligentes con sus equipos antihurto ‘Evol’, cuyas antenas permiten obtener valiosos datos. Además, la compañía trabaja en nuevos desarrollos para aminorar y facilitar el proceso de autoscaneado/autopago hacia el que parece que camina la distribución alimentaria, sobre todo en el caso de los hipermercados. De momento, ya comercializa unos túneles que permiten al paso del carro de la compra la desactivación de las alarmas, sin necesidad de tener que sacar los artículos. Este sistema se había hecho necesario con soluciones como la puesta en marcha por ‘Carrefour Planet’ con ‘Scan&Go’, que hasta ahora precisaba de un empleado para desactivar las alarmas.
El otro gran operador de soluciones antihurto que opera en España es Sensormatic-ADT, filial de la multinacional Tyco. Este grupo ha apostado por la tecnología acustomagnética, con una mayor penetración en el mercado de la distribucíón textil y perfumería. En alimentación, en nuestro país la cadena Dia es prácticamente el único gran especialista que se ha decantado por estos sistemas. De hecho, en 2011 Dia reforzó su acuerdo con ADT para la protección de todas sus tiendas propias y franquiciadas a nivel nacional, incluyendo la renovación de los sistemas antihurto de protección electrónica de artículos y potenciando su programa de etiquetado en origen. Para ADT-Sensormatic, “los sistemas antihurto tradicionales son algo del pasado”. La crisis ha hecho que se multipliquen los robos de productos de primera necesidad con poca o nula protección y “ya no valen los sistemas de hace 20 años”. Para estas nuevas necesidades, el grupo propone una plataforma que incluye sistemas de protección combinados con mecanismos de inteligencia de negocio, como la posibilidad de ofrecer a los propietarios de las tiendas los patrones de compra de los clientes de un determinado centro.
Romper el duopolio imperante
Frente a estos gigantes del sector, una serie de empresas tratan de romper el duopolio imperante en el mercado español, cada uno con unas armas diferentes, bajo la convicción de que la distribución necesita otras alternativas. Una de las más ambiciosas en cuanto objetivos de expansión es Gunnebo, grupo de procedencia sueca con un volumen de negocio de más de 45 M€ en España, pero con poca penetración en el campo de sistemas antihurto. Para remediarlo, en junio de este mismo año creó una filial para focalizar sus esfuerzos en este campo, denominada Gateway Loss Prevention. Gunnebo fabrica los tres sistemas que actualmente hay en el mercado (radiofrecuencia, acustomagnética y electromagnética), por lo que no recomienda ninguno por encima del otro. Hace una labor de consultoría e implanta el que crea necesario para cada cliente. La empresa ha habilitado un almacén propio en Madrid, con posibilidad de atender pedidos de consumibles en 24 h, y delegaciones en la capital y en Barcelona. Su estrategia pasa por firmar contratos a largo plazo, para poder profundizar en las necesidades de cada cliente. Así, a finales de 2010 ganó un contrato para el suministro a nivel nacional de una parte de los consumibles de antihurto a Carrefour. Igualmente, alcanzó acuerdos con El Corte Inglés y Miquel Alimentació, en este últmo caso para la red de supermercados propios y franquiciados del grupo catalán. Gateway prevé cerrar 2011 con ventas de 1 M€ y moverse entre los 7 y 8 M en un plazo de tres años.
Ambiciosos, igualmente, son los objetivos de Repromatic Trade, empresa que se caracteriza por la utilización de sistemas de última generación, a través de los cuales puede facilitar información estadística a sus clientes (número de personas, análisis por zonas, por franjas horarias, etc.). Estos equipos permiten su gestión remota, tanto a nivel de servicio y mantenimiento como de obtención de datos de la actividad comercial. Repromatic utiliza sistemas tanto de radiofrecuencia, incluidos sistemas de RFID, como acustomagnéticos, siempre en función de las necesidades de cada cliente. La compañía centra el grueso de su negocio en retail y por ello, partiendo de la seguridad como core business, ha desarrollado una serie de sistemas que a la vez resultan atractivos para el consumidor, potenciando su venta y permitiendo la interacción entre artículo y comprador. Se trata, en concreto, de completar la seguridad con técnicas de merchandising. Profundizando en esta dirección, la empresa está siendo pionera en la implantación de sistemas de etiquetaje electrónico gráfico, pantallas que permiten introducir y mostrar desde precios hasta promociones, mensajes, logos y cualquier diseño ejecutado por ordenador.
Por su parte, el valor añadido de otra de las empresas del sector, Sidep, es la “confianza”. La empresa lleva operando en España desde hace 20 años y trabaja puntualmente con todas las grandes firmas de la distribución. Una de sus principales características es la innovación, con el objetivo de introducir cualquier tendencia en nuestro mercado. En la actualidad prepara el inminente lanzamiento de un nuevo tipo de etiquetas para la protección de botellas y cuenta con soluciones avanzadas para tablets y electrónica de libre tocado. Al igual que Gateway, Sidep también trabaja con las tres tecnologías.
La madrileña Argos Soluciones Globales está poniendo todo su esfuerzo en ‘Global Guard’, único sistema a nivel internacional, según la compañía, dotado de videovigilancia oculta. Las antenas están dotadas de microcámaras que en la línea de cajas controlan y visionan pefectamente tanto al cliente como al empleado de caja. Al estar en las antenas, las cámaras ganan ángulo de ataque y proporcionan un registro visual perfecto. La compañía trabaja ahora con otra especialista para hacer al sistema sincronizable con la transacción, lo que haría de ‘Global Guard’ una “solución total”, al añadir aplicaciones POS (Point of Sale). Estas últimas permitirían ofrecer a los clientes y cadenas de distribución informes de auditoría y comprobación de marcas y/o artículos, búsquedas de las imágenes a paso por caja de determinados productos y una gran serie de informaciones de utiidad. De momento, cadenas como Alimerka ya cuentan con la protección de Argos.






