Cada año los obtentores vegetales y las empresas de semillas lanzan al sector nuevas variedades de frutos, con características específicas que benefician tanto al agricultor como al consumidor. Si bien la productividad es uno de los atributos con los que más ha trabajado la mejora vegetal para satisfacer a los segundos, en los últimos años estas empresas también se están adaptando a las nuevas tendencias de consumo, a las nuevas tipologías de consumidores y a los nuevos gustos. Sin embargo, esta información no llega al consumidor, que no es capaz de identificar las variedades que aparecen en el mercado si no vienen acompañadas por una marca o un nombre claro, ni tampoco conoce todo el trabajo que hay detrás de su desarrollo. Que esta información transcienda es tarea de todos, obtentores, productores, comercializadores y distribución.

Una de las principales peticiones del consumidor de hoy en día es el sabor. Y en este sentido, uno de los productos más cuestionados en los últimos tiempos ha sido el tomate. Hay muchos consumidores que buscan el tomate perfecto y que sepa a tomate. Para satisfacer esta necesidad Semillas Fitó ha trabajado durante ocho años para lanzar ‘Monte Rosa’, un híbrido del tomate pera de Girona y el Costoluto Genoveso, propio de la huerta italiana. Según explica la compañía, este tomate es la combinación perfecta, en cuanto forma, color, sabor y textura. Su nivel gustativo no es muy dulce y tiene una baja acidez. Para su producción cuenta con un único partner, la compañía catalana Gavà Grup, que en su tercer año de producción ya habla de 120 ha plantadas en Cabo de Gata (Almería), y no descarta que en dos o tres años hablemos de una superficie de 400 ha.

Por su parte, David Bodas, Food Chain Manager Iberia de Syngenta, explica que la compañía está apostando por la innovación en el mundo del tomate y, en particular, por dar respuesta a las nuevas tendencias de consumo. Así desde Syngenta trabajan para conocer los cambios que se producen en el mercado, así como la forma de hacer la compra y los hábitos de consumo. Y aunque el tomate es un producto con múltiples usos en la cocina (se utiliza en ensalada, gazpacho o cocinado como fritura), en los últimos años se ha experimentado una nueva tendencia en su consumo como snack. En este sentido, Syngenta puso en marcha su maquinaria de I+D para seguir innovando en el mundo del tomate, y el resultado fue la creación de variedades como Nebula, Angelle, Bambelo, Lemonade y Dulcemiel. El primero, a la venta desde 2013, es un tomate cherry rojo con un sabor extra dulce, debido a su alto contenido en fructosa, y que se intensifica por su contenido en ácido cítrico. El segundo es un cherry pera rojo, consumido como snack o como acompañante en platos con contraste de sabor, mientras que Bambelo es la versión naranja del Angelle. Las dos últimas variedades son las más novedosas, y “están orientadas para satisfacer al consumidor más aventurero, el que busca nuevas experiencias”, añade Bodas. Mientras que Dulcemiel es un cherry pera de color entre verde y color miel, y un sabor exótico muy dulce, ‘Lemonade’ es una especialidad de color limón, refrescante, equilibrado y con un gran contenido en azúcares.

También la empresa de semillas Nunhems, filial de Bayer CropScience, ha trabajado durante años para el desembarco de su tomate ‘Intense’ en la gran distribución. Si inicialmente la venta de este tomate, se orientó hacia el canal horeca, la compañía cambió su posicionamiento para abrir el abanico y llegar hasta el consumidor final. Entre sus características se encuentran su forma (oval o redondo), una pulpa densa que permite conservar tanto su jugo como su forma una vez cortado y su versatilidad en la cocina.

Otra de las novedades que está a punto de llegar al mercado es la nueva variedad que está desarrollando la casa de semillas H.M. Clause. Se trata de un tomate asurcado negro y con sabor. De sus características cabe destacar su durabilidad, que lo hace muy atractivo para la exportación, su sabor y su mayor productividad. Aunque aún se desconoce el nombre que recibirá, lo que sí se sabe es que estará disponible entre enero y mayo, y que lo comercializarán las empresas almerienses Agrupalmería, Grupo Casi, Granada La Palma y Biosabor.

El rojo está de moda

Además de los avances en la producción de tomate, el rojo también es tendencia en otros frutos. El proyecto internacional Ifored, fundado en 2012 para desarrollar una selección de variedades nuevas de manzanas de pulpa roja, ya es una realidad. Tras la plantación de huertos precomerciales en Europa la pasada primavera, la plantación comercial se realizará en 2018. En la actualidad, Ifored está desarrollando una marca y una estrategia de marketing para la venta de esta selección de nuevas variedades en todo el mundo. La catalana Nufri es el único socio español que forma parte de este proyecto, junto con otras 13 compañías a nivel mundial.

También el rojo ha llegado al albaricoque. La empresa PSB Producción Vegetal, con sede en Murcia, ha desarrollado la nueva gama de variedades de albaricoque Red Premium. Por el momento, cuenta con cinco variedades (Cyrano, Fuego, Cheyenne, Totem y HB278-104, que aún no tiene nombre comercial), todas ellas cubren la campaña de recolección desde principios de mayo hasta finales de junio en las zonas productoras del Mediterráneo (España, Italia y Francia). El resultado de las hibridaciones y pruebas es un albaricoque cien por cien rojo, con sabor y un brix de entre 12 y 15 grados.

Otros frutos rojos que también están mejorando sus variedades son las fresas y las frambuesas. La compañía Planasa, volcada principalmente en el cultivo de la planta de fresa, aunque también de frambuesa, arándano y mora, continúa impulsando el desarrollo varietal y reconoce destinar el 5% de su facturación al área de I+D+i. Tras el éxito de su fresa Sabrina, llegó la frambuesa Adelita, con óptimas cualidades organolépticas y que permite la planificación de los cultivos, pudiendo disponer de ellas los 365 días del año. No obstante, también está trabajando el desarrollo de variedades de otras frutas, como las de hueso, espárrago o ajo. Continuando con los berries, la empresa onubense Fresas Nuevos Materiales también trabaja para obtener mejores variedades de fresas, mientras que la comercializadora Onubafruit quiere experimentar el rendimiento y la calidad de nuevas variedades de arándano. Para ello, ha invertido 1 M€ en la explotación de una finca de 8 ha para ensayar y evaluar estas variedades.

Variedades “Club”

En los últimos años las variedades club se han ido imponiendo en el cultivo de la manzana, siendo algunas de ellas el resultado del cruce de otras variedades, como por ejemplo la Cripps Pink -más conocida con el nombre comercial ‘Pink Lady’-, la Scilate -’Envy’-, y Nicoter cov -Kanzi-. Esta tendencia también ha llegado a los cítricos, con variedades que se basan en la exclusividad y la limitación de la superficie productiva. De esta forma, se pretende que los frutos de estas variedades obtengan las máximas cotizaciones en los mercados. Las características novedosas que aportan algunas de estas variedades es la prolongación del periodo de recolección, sobre todo en el tramo final de la campaña. Es el caso de la variedad de mandarina tardías ‘Tango’, obtenida por la Universidad de California Riverside y cuya licencia de venta la tiene la compañía Eurosemillas en nuestro país. Según han explicado desde esta empresa, se trata de una fruta sin semillas, dulce, y que respeta el papel polinizador de las abeja. Además, añaden que aspiran a que la mandarina ‘Tango Fruit’ continúe incrementando su producción en nuestro país y que se posicione como un producto convenience en Europa, al igual que está sucediendo en EE.UU. De cara a esta campaña, la previsión es producir unas 10.000 t en España.

También la Compañía de Variedades Vegetales Protegidas (CVVP) obtuvo la mandarina tardía Nadorcott, cuyo nombre comercial es ‘Clemcott’, y la naranja Navel ultratemprana ‘M7’.

Otras novedades en cuanto a variedades son el melón ‘Galkia’, desarrollado por Nunhmes,un melón Galia con un exclusivo indicador de madurez que permite recolectar cada fruto en su punto óptimo de sabor y madurez; el ‘Buttonhole Kale’, de la británica Tozer Seeds, una variedad de col rizada (kale) que, a diferencia de otras variedades tradicionales, está compuesta por grandes hojas que envuelven un cogollo central de color morado; o la lechuga ‘Sanack’, de Rijk Zwaan, una variedad de lechuga especialmente apta para su uso deshojada como base o soporte de distintos preparaos (guacamole, queso, cremas, cebiches...)