Prestigiar el vino español, contribuir a mejorar su imagen, servir de plataforma para dar a conocer la extensa variedad vitivinícola de nuestro país y potenciar su peso internacional, son algunos de los principales objetivos de la Barcelona Wine Week (BWW). Un evento que se celebrará por primera vez en el recinto de Montjuïc de Fira de Barcelona del 3 al 5 de febrero de 2020, heredero de la feria Intervin, que se celebraba en el seno de Alimentaria. Precisamente este evento profesional ha sido impulsado por Fira Barcelona a través de su sociedad Alimentaria Exhibitions, con la colaboración del Ministerio de Agricultura, la Federación Española del Vino y el ICEX. Como presidente de BWW ha sido nombrado Javier Pagés, quien también preside desde el año pasado el Consejo Regulador de la DO Cava.
Barcelona Wine Week aglutinará y pondrá en valor la más amplia oferta de las distintas zonas vitivinícolas españolas, dando cabida a todo tipo de bodegas y especialidades. De hecho, según ha explicado Javier Pagés, la previsión es incluir unas 600 bodegas y acoger a distribuidores e importadores de más de 30 países.
“Con esta propuesta de valor, BWW irrumpe en el panorama ferial para dar respuesta a la propia demanda de las empresas y entidades del mundo del vino en busca de una nueva plataforma de internacionalización”. Y añade en declaraciones a Alimarket, que "cualquier bodega interesada en proyectarse y que elija BWW como plataforma para hacerlo está invitada". "Habrá una serie de módulos diferentes, con representación vertebrada en forma de territorio, de forma que el visitante podrá recorrer toda la diversidad del vino español a través de sus regiones". Añade Pagés que se han diseñado los stand, con una imagen unificada, en tres tamaños diferentes y además habrá una zona para los grupos bodegueros que quieran reunir en un espacio su amplia oferta.
Antonio Valls, director de Alimentaria Exhibitions, ha explicado que BWW ocupará 30.800 m2 repartidos en dos pabellones (1 y 8) en Montjuic, con cuatro áreas de actuación: Negocio (con el Programa Hosted Buyers; el Programa VIP Buyers; y el Programa Recomienda, por el cual las bodegas pueden referir aquellos países y compradores a los que les gustaría invitar al evento); Exhibition (pone en valor el producto y las características de cada territorio, tanto con la distribución de las bodegas y DO por regiones como con la inclusión, como explicaba Pagés, de una zona específica para grandes grupos, otra para espumosos y sparkling wines y una última de complementos y utensilios relacionados con el vino); Hub (BWW tiene una vocación formativa, de poner en valor la cultura de vino, mediante catas, conferencias, ponencias, una zona de "50 fabolous wines by women" y una área para start ups relacionadas con el vino); y Gastronomía (el vino como alimento y parte de la dieta mediterránea, espacio para maridajes, área para la elaboración de cocktails, etc.).
Con el acento en las oportunidades de negocio
En relación al programa Hosted Buyers, el responsable del área de Vinos del Icex, Alfonso Janeiro, ha explicado que se trata de un ambicioso plan en el que participa el ICEX y que tiene como objetivo rentabilizar al máximo la presencia de las bodegas en la feria, aumentar las oportunidades de negocio y maximizar el retorno de las empresas expositoras. A través del mismo, el salón prevé invitar a más de 300 profesionales internacionales de alto nivel procedentes de 37 países considerados estratégicos por el sector, entre los que destacan Reino Unido, Alemania, Holanda, Bélgica, Suiza, Rusia, Estados Unidos, Canadá, México, Brasil, China-Hong Kong, Japón e India. Cada uno de estos compradores especializados e interesados en el mercado español tendrá que cerrar un mínimo de diez reuniones con los expositores seleccionados
“El proyecto está respaldado por una importante inversión para asegurar la presencia de los principales operadores internacionales. Además, en el salón podrán identificarse nuevas tendencias, startups y otros proyectos que pasan por la digitalización, sin olvidar a los representantes del sector tradicional. Esta transversalidad es, de hecho, uno de los puntos fuertes del salón y uno de sus principales atractivos de cara al mercado internacional”, ha señalado J. Antonio Valls, director general de Alimentaria Exhibitions.
José Luis Benitez, director general de la Federación Española del Vino (FEV), está de acuerdo en que el enorme potencial de los vinos españoles necesita comunicarse mejor a los diferentes mercados y para ello aboga por la creación de una marca-país, un objetivo al que puede construir la BWW.
El salón cuenta con el apoyo de las principales empresas, instituciones y organismos del sector en el ámbito nacional. Así, algunos de los territorios que ya han confirmado su participación en el certamen son Castilla y León, Cantabria, Euskadi, Cataluña y Madrid, así como las DO Alicante, Jumilla, Montsant y Conca de Barberà, entre otras. En cuanto a bodegas, expondrán en la primera edición de BWW tanto grandes empresas como pymes representativas de toda España: J. García Carrión, Familia Torres, Roqueta Origen, Burgo Viejo, Matarromera, Araex, Pinord, Manzanos Wines, Albet i Noya, Izadi (Grupo Artevino), Pere Ventura, Vicente Gandía, Campos Reales, Otazu, Destilarías La Navarra, PradoRey (Real Sitio de Ventosilla) o Balmoral son algunas de las compañías que expondrán en el salón.
El consumo nacional se recupera
España, primer viñedo del mundo (953.000 ha), es también líder en exportación de vino, con más de 21 M hl anuales, según datos del Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV). Los principales mercados destinatarios de los vinos españoles son Reino Unido, Alemania y Francia, si bien los crecimientos más destacados en ventas se observan en EE.UU., Canadá, México, Italia, China e Irlanda.
Este proceso de internacionalización de las bodegas españolas tiene que ver también con una necesidad de salir fuera, ante la caída constante en las últimas decadas del consumo nacional. Si bien, Rafael del Rey, director general del OeMv, ha constatado que el consumo nacional de vino se mantiene estable en los últimos años (sobre los 10 M hl anuales) y parece estar subiendo en 2019, “con novedades muy interesantes en cuanto a los vinos de calidad, los vinos blancos, nuevos espumosos, redescubrimiento de muchas zonas y antiguas variedades (garnachas, godellos, mencías, etc.), que dan una gran modernidad al vino y auguran un mejor futuro”.
Grandes sumilleres apoyan el vino español en el mundo
Para Josep Roca, sumiller del Celler de Can Roca, “BWW es una plataforma que puede promover y catapultar el vino español en el mundo. Estamos en el mejor momento de los últimos años. En España hay relato, historia, una generación joven y con talento preparada para sacar a la luz y encumbrar el vino español". No obstante, tampoco oculta que hay por delante un enorme trabajo por hacer, para aprender a comunicar y para asumir como propia una revolución que se está produciendo en el mundo y que tiene que ver con poner el foco en las personas, en la conciencia ecológica y en la sostenibilidad. Y lanza un reto: "ya somos el primer viñedo del mundo, ¿porqué no ser también el primer viñedo ecológico del mundo?".
En opinión de Ferran Centelles, sumiller de El Bulli Foundation y corresponsal en España de JancisRobinson.com., la seducción y la comunicación son la clave para llegar a los mercados internacionales: “Hay que buscar estrategias comunes y explicarlas, generar valor desde lo transversal. El futuro es que nos conozcan de una manera seductora”. Y esa generación de valor no tiene que ver únicamente con la producción, sino más bien con la capacidad de distribución y con la imagen que se proyecta.
