La segoviana Dibaq PetCare ha ampliado su línea de alimentación holística para perros 'Dibaq Sense', presentada a finales de 2018. Ahora, lanza una gama "grain free", bajo el nombre 'Dibaq Sense Low Grain', a partir de ingredientes naturales: carne fresca, arroz, frutas, verduras y antioxidantes naturales. La gama ha sido elaborada para respetar los requerimientos nutricionales naturales de los perros y fortalecer su sistema inmunológico, evitando alergias o problemas digestivos.
Las recetas están elaboradas con carnes frescas como primer ingrediente existiendo referencias monoproteicas de pollo y recetas elaboradas únicamente con pescado (salmón y atunes frescos) para evitar intolerancias a otras proteínas de origen animal. Es un alimento hipoalergénico ya que están libres de trigo, maíz, soja, gluten ni huevo y además están elaboradas con más de un 20% de arroz, pensadas para perros con digestión sensible. La gama se ha estructurado por edades (cachorros, adultos y seniors) y por razas (grandes y minis), además de atender a animales con necesidades especiales (problemas de sobrepeso, articulares, etc.). La nueva gama se posiciona, al igual que el resto de la línea 'Sense', en tiendas especializadas, canal que ha absorbido buena parte de las últimas innovaciones de la empresa en particular y del sector en general.
Además, el lanzamiento llega en un contexto, la actual pandemia de Covid-19, en el que muchas compañías están optando por retrasar sus novedades. Sobre esta situación, Dibaq ha querido ser cauta en sus declaraciones, aunque afirma que sigue manteniendo su "firme compromiso con todos sus clientes y, por ello, la compañía ha desarrollado planes de contingencia que recogen diferentes escenarios, con el fin de garantizar la continuidad del servicio, así como la máxima calidad del mismo". "No hemos tenido roturas de stock", continúan las mismas fuentes, "ya que estábamos previstos tanto en proyección, como en normas y regulación de personal".
Dibaq cerró el ejercicio 2019 con ventas de 50 M€ y una plantilla de 90 empleados, una cifra muy similar a la de 2018. Esta facturación incluye los ingresos que el grupo obtiene de su filial húngara -donde tiene una planta- y las ventas en otros países (está presente comercialmente en 63). El mercado español absorbe algo menos de la mitad de su negocio.
