¿Quién no ha pedido alguna vez comida en casa a través de 'Glovo'? Probablemente la mayoría de respuestas sean afirmativas. Y es que la start up que se encarga de que otros hagan tus recados por ti no ha dejado de ganar popularidad entre los consumidores desde su puesta en marcha en 2015, para convertirse oficialmente en eso que se denomina "unicornio" el pasado 2019, tras haber conseguido levantar inversiones por valor de 421,8 M€. Es la punta de lanza de un ecosistema foodtech nacional que está integrado por aproximadamente 400 proyectos emprendedores, que, a diferencia de 'Glovo', vienen a recibir de media inversiones por valor de 600.000 €, situándose a la cola de Europa en este aspecto, y que en un 63% afirman que la industria nacional de alimentación y bebidas no está apoyando el desarrollo de start ups en el sector. Son algunas de las conclusiones que ofrece el estudio elaborado por el hub de innovación especializado en el sector agrifoodtech, Eatable Adventures, el primero llevado a cabo en nuestro país sobre el estado del foodtech en España.

Pero no todo son piedras en el camino. La inversión en foodtech está creciendo deprisa. Según Eatable, el segmento comienza a considerarse un activo de inversión de alto valor, y está previsto que durante 2021 prácticamente se triplique el nivel de inversiones en estas compañías con respecto a 2019, pasando desde los 45 M€ de aquel ejercicio a los 131 M€ que se esperan recaudar el año que viene. Son buenas noticias, aunque estas cantidades palidecen frente al total de inversión en foodtech a nivel global, que en 2019 fue de 19.8 billones de dólares, consolidando a Estados Unidos como líder indiscutible al obtener el 44% del total negociado, seguido de China, India, Reino Unido e Israel. En España, tras 'Glovo', las startups que más inversión están captando en el último año son Qubiq Foods, Biome Makers, Foods for Tomorrow, Bio Tech Foods y BioFlytech, si bien las cuantías de las operaciones no suelen ser públicas en nuestro país. Otra de las buenas noticias que nos deja este informe es el alto componente tecnológico de las propuestas de este ecosistema. Así, el 60% de los proyectos monitorizados emplea "deep tech" en sus proyectos, destacando el uso de tecnologías como biotech (24%), inteligencia artificial (23,6%), machine learning (20,4%), IOT (17,2%), robótica (16,1%) o blockchain (5,4%).

Si nos comparamos nuevamente con nuestros competidores en este campo del foodtech -dejando aparte ahora a EE.UU., UK, China o Israel, la media de inversión absorbidas por las start ups en mercados como Francia o Alemania alcanza los 1,6 M€, prácticamente triplicando la media nacional. Tampoco salimos bien parados en la comparativa sobre nuestra capacidad de transferencia tecnológica desde las instituciones académicas o tecnológicas. En nuestro país, el 64% de los proyectos desarrollan su tecnología "in house", mientras que en otros ecosistemas como el israelí o el holandés, el peso de la universidad es mucho más elevado.

¿A qué se dedican las start ups nacionales?

El término Foodtech es muy amplio y engloba todos aquellos agentes que aplican tecnologías a la cadena de valor agroalimentaria, desde la producción hasta el consumo del alimento aportando innovación, eficiencia, seguridad y sostenibilidad. Este estudio ha permitido clasificar a las start ups a lo largo de la cadena de valor agroalimentaria. Así, casi el 40% de las startups españolas del sector están centradas en el área de producción y transformación de alimentos, que es una tendencia que se está dando a nivel global y no sólo en nuestro país. Los productos elaborados con nuevos ingredientes y las nuevas fuentes de producción de ingredientes representan casi un 70% de la actividad en este área. Le sigue el área de logística, distribución y retail, que concentra el 29% de las iniciativas. Aquí, los nuevos canales de venta directa al consumidor capitalizan por completo la categoría de distribución y retail, ya que el 85% se encuentra trabajando en este ámbito. A continuación se sitúan los sectores de agritech (17%) y restaurant tech (15%).

Desde Eatables también se ha preguntado a estas alrededor de 400 start ups sobre los principales retos que afrontan en su desarrollo. En este sentido, destacan sus respuestas sobre el escaso apoyo de la industria de alimentación y bebidas, o sobre la dificultad para acceder a ayudas públicas, extremo que citan un 72% de ellas.

Eatable presenta 'Spain FoodTech Startups Program'

Según señalan sus promotores, es precisamente de esa necesidad de colaboración de la que surge 'Spain FoodTech Startups Program' que nace "con el propósito de apoyar el desarrollo de start ups sólidas en nuestro país", y que cuenta con el apoyo tecnológico del Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria (CNTA) y de instituciones como ICEX y Food for Life. Tras un amplio proceso de selección, que ha contado con más de 170 candidatos nacionales, las seis start ups seleccionadas han sido:

-Cocuus, por su trabajo en la tecnología del scaffolding, un aspecto básico en la industria de la carne cultivada.

- H2hydroponics, que plantea soluciones para cultivos indoor y cultivos verticales. 

- Innomy, que elabora alternativas vegetales con base de hongos.

- Moa, que trabaja en la transformación de residuos alimentarios en proteínas.

- Proppos, que propone aplicar la inteligencia artificial al proceso de pago en foodservice y retail.

- Whatthefood, que trabaja para aplicar la robótica a la elaboración de platos, enfocado principalmente al delivery.

En los próximos seis meses, las start ups podrán recibir hasta 500.000€ de inversión procedente de los principales inversores del sector a nivel global, y contarán con un plan de trabajo personalizado liderado por un equipo senior que trabajará en áreas como: desarrollo tecnológico y protección de la propiedad intelectual, acceso a mercados globales, propósito de marca, perfeccionamiento del producto o servicio y plan financiero, entre otros. Además, tendrán acceso al acompañamiento tecnológico de CNTA, enfocado a lograr el desarrollo y la consolidación tecnológica de sus soluciones en un menor periodo de tiempo.