El grupo burgalés Pascual acelera su crecimiento internacional con foco en mercados emergentes para conseguir el objetivo de los 100 M€ de facturación internacional en 2027, coincidiendo con el cierre de su plan estratégico “Rumbo 24–27”.
Regiones como Centroamérica, el sudeste asiático y el norte de África viven un fuerte desarrollo demográfico y un creciente interés por productos accesibles, nutritivos y seguros. La baja penetración en categorías como yogures de larga vida o bebidas vegetales, a menudo encarecidas por su condición de importadas, abre nuevas vías de expansión para modelos industriales locales, informan en un comunicado.
La compañía, que prevé alcanzar los 70 M€ de facturación en 2025 por esta división, sigue creciendo en regiones clave gracias a proyectos de producción local en Guatemala, Maruecos y Filipinas, a los que se sumarán otros en el futuro como Indonesia. Su estrategia se articula través de alianzas de larga duración con socios líderes y un modelo de innovación adaptado a cada país.
En palabras del director de Internacional de Pascual, Tomás Meléndez, "trabajamos mercado a mercado, apoyándonos en socios locales y en nuestra capacidad industrial para llevar productos nutritivos y accesibles a millones de consumidores”.
La compañía acaba de arrancar la fabricación de 'Bifrutas' en Marruecos y de los yogures 'Pascual' y las bebidas vegetales 'Vivesoy' en Guatemala, donde comenzó con 'Bifrutas' en 2023. Si bien, el proyecto más destacado, que verá la luz en 2027, es la instalación de los equipos para producir yogures de larga duración en Filipinas, junto con su socio Asia Brewery. La inversión prevista será de unos 17 M€, ya que la infraestructura ya la tienen a través del socio local. Pascual ya es líder en la categoría con una cuota del 40%.
"Nuestra propuesta de valor es necesaria en estos mercados donde hay mucha población infantil y juvenil, grandes consumidores de lácteos. Aunque es cierto, que muchos de estos países se están volviendo cada vez más proteccionistas", señala Tomás Meléndez.
Un modelo común de joint-venture al 50%, con productos adaptados a cada país
Pascual cuenta con un modelo internacional adaptado a las particularidades de cada país. En Filipinas, opera a través de ABI Pascual Foods, la joint venture que creó en 2013 con Asia Brewery Inc. Desde 2023 también produce a nivel local yogur líquido en cristal y en cartón. Un proyecto consolidado que se va a ampliar con sabores adaptados al mercado (Ube, Dalanda, Jack fruit) y programas de RSC centrados en la nutrición infantil. Con la puesta en marcha de la nueva esperan también expandirse en el sudeste asiático, con Filipinas como plataforma logística de todos sus productos. La previsión de ventas para 2025 es de 20 M€, con una plantilla de 50 empleados.
En Guatemala, va de la mano de Gracia Foods, la joint venture con Corporación Castillo Hermanos, una compañía líder en bebidas en Centroamérica. En este mercado prevé superar los 4 M€ de facturación en 2025, que supone crecer el doble que en 2024. Además de Guatemala, Gracia Foods ya opera en Honduras, El Salvador y Panamá. Asimismo, desde allí abordarán mercados del Caribe como Jamaica, República Dominicana y Cuba, entre otros. De ese modo, en dos años el objetivo es alcanzar los 12 M€.
Desde 2024, Pascual produce también para el mercado local marroquí junto a su socio AJP, un avance que permite a la compañía competir en precio y crecer en distribución en todo el país de la mano de Activ Distribution. La producción local de 'Bifrutas Tropical' ha impulsado su presencia en el canal tradicional, que supone el 90% del mercado de distribución del país. De esta manera, Pascual espera cerrar el año con 4,5 M€ de facturación, un 20% más que en 2024; mientras que la expectativa es alcanzar los 10 M€ en tres años con 'Bifrutas', las bebidas vegetales 'Vivesoy' y yogures de larga vida 'Pascual'.
Marruecos, con 38 M de habitantes y una población juvenil del 40%, demanda productos nutritivos y asequibles, lo que refuerza el potencial del proyecto a largo plazo, informan en su nota. Además, la compañía ha consolidado su presencia en el norte de África con la creación de la filial Pascual Afrique Du Nord.

Por último, Pascual mantiene en pausa su proyecto en Angola debido a la alta inflación, la devaluación del kuanza, la contracción del consumo y la fuerte dependencia del petróleo del país. Tras más de 25 años exportando a Angola, donde 'Pascual' es la primera marca en yogures de larga vida (“os cremosos da Pascual”), la producción local, iniciada en 2022, se ha ralentizado a la espera de un entorno más estable, aunque la demanda y la juventud de la población mantienen el potencial de futuro de este proyecto.
Desde 2019, la compañia ha logrado llegar a 60 mercados emergentes en los que comercializa actualmente unos 170 M de yogures al año, ya que según apunta Meléndez "la esencia de nuestra estrategia de internacionalización está en los yogures".







