La startup de agricultura molecular Moolec Science ha recaudado 30 M$ en una operación combinada que aporta efectivo y acceso a capacidades industriales y a materias primas. La operación permite a la startup de origen argentino reforzar su posición financiera, con el objetivo de acelerar su modelo de negocio, continuar financiando proyectos de I+D y asegurar el capital de trabajo necesario para impulsar el desarrollo de sus productos y su plan de comercialización, según explicaba José López Lecube, director financiero de la compañía, al medio especializado AgFunder News.

La operación se va a materializar mediante la emisión de una nota convertible con vencimiento en 2026 en favor del Grupo Insud por valor de 21 M$, a cambio de una inyección de capital en efectivo de 10 M€ y la prestaciones de determinados servicios, incluido el acceso a sus capacidades industriales. La segunda pata de esta operación involucra al grupo argentino de biotecnología Bioceres, que asegura el suministro de 15.000 t de soja a Moolec, a través de la emisión de un segundo pagaré convertible, para alcanzar el total de los 30 M$ recaudados en la operación.

Asequibilidad y la funcionalidad para avanzar en sus propuesta proteica

La noticia llegaba apenas unos días después de la participación Henk Hoogenkamp, CPO de Moolec Science, en el evento foodtech 'ftalk 2023', celebrado la pasada semana en Valencia. Allí, Hoogenkamp explicaba la capacidad de la compañía para modificar los vegetales con el objetivo de crear proteínas y grasas, a la vez que destacaba la necesidad de adaptar estos desarrollos tecnológicos a las capacidades de producción actuales del sector alimentario, poniendo la eficiencia y el coste en el centro de su modelo de negocio, con el objetivo de impulsar el impacto de su trabajo.

Moolec saltaba a los titulares de la prensa internacional a mediados de este año, cuando presentaba su nueva plataforma tecnológica 'Piggy Sooy', basada en la modificación genética de la semilla de soja para lograr producir proteínas de carne de cerdo. Según explicaba Gastón Paladini, CEO de la startup, "estamos replicando lo que hace la naturaleza en un animal a través de una planta, únicamente modificando la semilla, en el inicio de la cadena de valor, mientras la biología y la infraestructura actual de cultivo hacen el resto, lo que nos acerca a alcanzar la paridad de precio con la proteína animal tradicional".

En esta línea, ahora Paladini explica: "En lugar de gastar sumas importantes en extraer y purificar las proteínas cárnicas de las proteínas vegetales, Moolec planea vender proteínas de soja y guisantes en las que las proteínas cárnicas están incrustadas en la matriz. Para nosotros tiene sentido producir juntos ingredientes híbridos entre proteínas vegetales y animales. La asequibilidad y la funcionalidad son nuestras principales prioridades para llegar tanto al sector cárnico como al de las proteínas alternativas".

Más allá del proyecto Peggy Sooy, la cartera de productos de la startup integra ya complementa una cartera de productos integra ya una proteína bovina utilizada en la elaboración de queso, y un aceite nutricional que contiene ácido gamma-linoleico, ambos expresados por una cepa de cártamo genéticamente modificada.

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