Como estamos viendo en la newsletter foodtech de esta semana, la industria cárnica y conservera nacional continúa profundizando en su oferta plant-based, bajo la premisa de optimizar su posicionamiento en una de las tendencias de fondo más importantes en alimentación y bebidas durante los últimos años. Ya sea como un complemento en su actividad en innovación de producto o como una apuesta firme por una gama independiente que busca satisfacer nuevos hábitos de consumo, lo cierto es que la industria continúa sumando innovación relevante en este campo. A nadie se le escapa que esta nueva industria viene atravesando un contexto tremendamente desafiante, marcado por grades retos como la inflación, la insatisfacción en la experiencia de consumo o la percepción de productos ultraprocesados, lo que se ha venido reflejado en una tendencia de descenso del consumo global en alternativas cárnicas y en el escaso despegue de la actividad que se viene registrando en las alternativas vegetales a productos del mar. Pero, ¿y si esa tendencia bajista en la demanda está empezando a cambiar ya en 2024?

Así podría desprenderse de los últimos datos aportados por la cadena de supermercados británica Tesco, que tras la caída registrada en 2023 en la demanda de alimentos de origen vegetal, durante los meses transcurridos de 2024 destaca un aumento en su demanda. El minorista hablaría ya de una "segunda fase" en la trayectoria de "la mayor tendencia alimentaria de este siglo", a medida que aumenta la demanda de ingredientes sin carne y cortes enteros. Según la directora de compras de productos plant-based de la cadena, Cate May, "el nivel inicial de interés inevitablemente iba a disminuir ligeramente, pero en esta fase dos estamos viendo a flexitarianos que quieren tener más control sobre lo que comen, mientras continúan reduciendo su consumo de carne”.

En los últimos tres meses, las ventas de productos pesqueros de origen vegetal en Tesco aumentaron un 100% en comparación con el mismo período del año pasado. De manera similar, los filetes y pechugas de pollo plant-based han experimentado un aumento del 20%, mientras que las compras de hamburguesas sin carne han aumentado un 10%. Incluso las proteínas vegetales tradicionales como el tofu y el tempeh crecieron un 20%.

Considerados durante mucho tiempo como "el santo grial" de la carne de origen vegetal, los cortes enteros han comenzado a posicionarse en los lineales. En el caso de Tesco destacan los productos de la eslovena Juicy Marbles, ejemplificando su trayectoria en la cifra de ventas récord registrada en vísperas del Día de San Valentín, cuando se comercializaron 100.000 de sus filetes vegetales, lo que se ha calificado como "una cifra sin precedentes". "Los clientes están empezando a comprender la versatilidad de los ingredientes de origen vegetal y de los cortes integrales, y están empeando a integrar estos productos en una gran variedad de recetas", afirma May.

"También está empezando a aumentar la conciencia sobre los beneficios para la salud que supone hacer algunos cambios sencillos en la dieta, por ejemplo, reducir las grasas saturadas y al mismo tiempo mantener altos niveles de proteínas, aumentando la cantidad de plantas y alimentos de origen vegetal en sus dietas y luego complementando sus dietas con más verduras frescas", continúa.

El pasado mes de diciembre, Tesco llevó a cabo una encuesta a 2.000 adultos en el Reino Unido y encontró que el 46% de los británicos comen más vegetales que hace cinco años. Para el 47%, introducir más verduras en sus platos fue una decisión deliberada, siendo los principales motivos la salud (82%), el impacto medioambiental (25%) y el ahorro de costes (22%). Por otro lado, los datos oficiales que se emiten desde el Gobierno demuestran que en 2023 el consumo de carne en Reino Unido se situó en su nivel más bajo desde que se empezó a mediar este registro hace casi medio siglo.