El mercado inmobiliario español ni remonta ni tiene visos de hacerlo, como lo demuestra uno de los últimos indicadores que se ha dado a conocer. Así, el saldo vivo de créditos hipotecarios registró una subida al cierre del pasado mes de abril de sólo un 1,4%, lo que significa el menor crecimiento interanual de la historia desde que la Asociación Hipotecaria Española (AHE) comenzara a elaborar este cálculo. Un año antes, ya bajo la sombra de una posible crisis económica, el saldo vivo de crédito hipotecario crecía a un ritmo del 11,3%, diez puntos más que ahora. En concreto, el saldo vivo se situó en abril de 2009 en 1,09 B€, de los cuales 594.415 M correspondían a cajas de ahorro (+0,4%), 388.155 M a bancos (+2,9%), 68.314 M a cooperativas de crédito y 10.564 M a establecimientos financieros de crédito.

En lo que respecta a la conversión de préstamos en títulos de deuda para su puesta en el mercado, la venta mantiene un ritmo que ronda el 33%, similar al de ejercicios anteriores. La semana pasada el BCE anunció que pensaba articular un programa de compra de cédulas hipotecarias por importe de 60.000 M€. La operación se materializará a través de los 16 bancos centrales nacionales y las cédulas que se adquieran no tendrán un vencimiento superior a los cinco años.