Abengoa continúa ejecutando su proceso de reorganización para adaptar su estructura a su nuevo tamaño, tras la reestructuración de la deuda que le permitió dejar atrás el preconcurso. Así, ha iniciado las negociaciones con los representantes sindicales de las filiales Abeinsa EPC, especializada en la construcción de proyectos, y Abeinsa BD, dedicada al desarrollo de negocio , para poner en marcha nuevas regulaciones de empleo tanto de carácter extintivo como temporal. En conjunto, la medida afectará a 145 trabajadores . En concreto, en Abeinsa EPC, donde la empresa presenta ya su tercer ajuste desde agosto de 2016, Abengoa ha propuesto despedir a 63 operarios a través de un ERE y suspender temporalmente a otros 41 mediante un ERTE. Por su parte, en Abeinsa BD, que sufre también su segundo recorte desde agosto del año pasado, los afectados serían 41 empleados, la totalidad de su plantilla actual, de los que 34 dejarían sus puestos de trabajo y siete serían suspendidos. En ambos casos, las regulaciones temporales se prolongarían por un periodo de 10 meses. Las negociaciones concluirán el próximo 3 de julio en el caso de los ERTE, mientras para los ERE el plazo se alargará hasta el 17 de julio.
Actualmente y según las cifras aproximadas que manejan los representantes sindicales, la plantilla de Abeinsa EPC está formada por 337 trabajadores, 213 menos que en agosto de 2016, de los cuales 92 se vieron afectados en el primer ERTE, 158 en el segundo y 108 en el tercero. En el caso de Abeinsa BD, la plantilla actual está formada por 41 trabajadores, frente a los 330 con que contaba en agosto de 2016. Desde los sindicatos han criticado la subrogación de la mayor parte del personal de Abengoa a dos sociedades de nueva creación, Abengoa Energía y Abengoa Agua, que aglutinan la actividad del anterior corazón estratégico de la empresa, la ingeniería y construcción industrial. De esta manera, han advertido de que Abengoa está "vaciando de contenido y de trabajadores las sociedades históricas", como son Abeinsa BD, Abeinsa EPC, Abeinsa Engineering, lo que viene a sumarse a la desaparición de Abengoa Research, Abengoa Solar o Bionergy, entre otras.
Abengoa, que se encuentra en pleno proceso de desinversión en activos , consolidó ingresos de 1.510 M€ en 2016, frente a los 5.755,5 M que facturó el año anterior, y se apuntó pérdidas de 7.629 M
