El Senado ha aprobado por unanimidad de los grupos de la cámara, a propuesta del Partido Popular, la creación de un grupo de trabajo en el seno del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente que se dedicará a analizar y fomentar la racionalización y reducción del uso de envases y embalajes. El grupo de trabajo pretende la introducción gradual en la cadena de distribución comercial de envases y embalajes fabricados con materias primas sostenibles, renovables y biodegradables. Lo que supondrá la s ustitución de envases y embalajes no sostenibles en las estanterías de los supermercados, por otros afines con el medio ambiente.

Esta iniciativa responde a una necesidad que las organizaciones ecologistas, impulsadas por el Instituto para la Producción Sostenible (IPS), reclamaban desde la aprobación de la Ley de Residuos y Suelos Contaminados en 2011, celebrando jornadas de trabajo al respecto, generando estudios, organizando conferencias y seminarios, etc. Concretamente, el IPS había venido solicitando específicamente desde 2011 la creación de este grupo de trabajo previsto en la ley.

Los envases y embalajes son un elemento imprescindible en la cadena de distribución de cualquier producto, no obstante, existe una preocupación de gobiernos, instituciones, empresas y consumidores sobre la sostenibilidad y el factor medioambiental en todo el ciclo de vida del producto, desde el origen de la materia prima hasta que el producto se convierte en residuo en sí mismo. La creación de este grupo de trabajo sitúa a España al frente de Europa en prevención de residuos. Es una respuesta para afrontar los nuevos escenarios de competitividad, que exigen tener en cuenta el impacto medioambiental y la reducción de la nocividad de los mismos.

El IPS ha señalado que, en su apuesta por una legítima interlocución con administraciones públicas y organismos de referencia para alcanzar los mayores avances en la implantación de normativas, políticas y prácticas que supongan mejoras para la competitividad y excelencia del tejido empresarial español, se posiciona a favor de esta iniciativa que coincide con los principios y objetivos de la entidad inspirados en los valores que aporta el uso de materiales sostenibles a la sociedad, y que fomenta la fabricación, distribución y comercialización de productos con materias primas renovables, reciclables y biodegradables.

El IPS entrega sus primeros Certificados de Sostenibilidad a empresas de Cataluña

Por otra parte, el IPS ha entregado sus primeros Certificados IPS de Sostenibilidad a empresas catalanas fabricantes de planchas y envases y embalajes de cartón ondulado. Concretamente, a Cartonajes del Penedés, Cartonajes M. Petit e Ineco. El Certificado IPS acredita el compromiso de las empresas con el desarrollo sostenible y es el único en España que garantiza que los procesos y productos cumplen con los requisitos de sostenibilidad asociados a las fases del proceso productivo y a los materiales que componen lo productos.

En este sentido, el Secretario de Medio Ambiente y Sostenibilidad de la Generalitat de Cataluña, Josep Enric Llebot, ha destacado que "Cataluña es líder en certificaciones ambientales. Más de 600 empresas tienen algún tipo de certificación ambiental oficial. Esto supone una gran apuesta de nuestras empresas en beneficio del medio ambiente y la competitividad." En este sentido, Llevot ha valorado el apoyo a las empresas por parte de la Generalitat de Cataluña, ya sea dando soporte a las certificaciones ambientales, con líneas de ayuda o dando constante apoyo a las empresas interesadas.

El IPS legitima este Certificado de Sostenibilidad implementando un referencial propio, específico para cada sector de actividad, que valora, entre otros aspectos, el cumplimiento de la normativa y de los principios de la producción sostenible, el origen de las materias primas, la integración en lo local y el derecho de los trabajadores, el impacto ambiental, la trazabilidad y las prácticas comerciales.

En palabras de José Cabrera, presidente del IPS, "nuestro Instituto busca la producción sostenible en cualquier campo empresarial, y todas las compañías están invitadas a incorporarse a la entidad asumiendo los objetivos y exigencias que se marcan para sumar fuerzas. Son ya muchas las empresas que han solicitado el Certificado IPS, que promueve la excelencia empresarial acreditando que el proceso es sostenible, proviene de fuentes legales y el producto se caracteriza por ser renovable, reciclable y biodegradable".

El director general de Cartonajes M. Petit, Miguel Petit, ha señalado que "el Grupo Petit es totalmente respetuoso con el medio ambiente, siendo el papel y cartón la apuesta más natural en el fomento por la sostenibilidad mediante procesos productivos limpios, el reciclado continuo de sus productos y la gestión de papel recuperado sostenible. Este certificado demuestra que incorporar criterios de sostenibilidad no está reñido con la rentabilidad. Los hábitos sostenibles en la empresa y en general en la sociedad tienen un claro beneficio económico, social y ambiental".

Para Ignasi Montfort, director general de Cartonajes del Penedés, "este certificado es un paso muy importante para que nuestra compañía mantenga su compromiso de respeto medioambiental. Primero hemos certificado que nuestra producción es sostenible, pero ahora debemos, año tras año, renovar este compromiso, sin relajarnos y manteniendo estos criterios. Cartonajes del Penedés entiende que sólo se puede producir de manera sostenible, ya que solo así nos aseguramos el futuro, tanto de la empresa, como de la sociedad".

Para Javier Clos, consejero de Ineco, "la calidad y el respeto al medio ambiente han sido siempre premisa en nuestra empresa. Nos esforzamos por mantener un equilibrio entre la máxima calidad de nuestros productos y un escrupuloso respeto a las leyes que protegen el medio ambiente, además de ser responsables en la expansión empresarial y cumplir con el desarrollo de nuestros trabajadores. La sostenibilidad ha llegado para quedarse en Ineco".

Para obtener este certificado, las empresas deben pasar una auditoría en la que se confirma que cumple con la normativa y principios de producción sostenible, que la fuente de sus materias primas es legal y reconocible, y que está integrada en el desarrollo local y es respetuosa con el derecho de los trabajadores. Asimismo, el certificado reconoce que desarrolla políticas de reducción del impacto medioambiental, y que toda su actuación está basada en principios de sostenibilidad en el plano económico, social y medioambiental.