* El sector sigue esperando un punto de cambio en la industria alimentaria que no acaba de llegar. Superado lo peor de la crisis, el mercado esperaba un fuerte aumento de la demanda para incorporar líneas de última generación de forma masiva. Sin embargo, parece que pesa más la tradicional resistencia del consumidor español a los nuevos formatos y la recuperada preeminencia del producto fresco en los lineales, de forma que ese instante de transformación de la industria alimentaria queda cada vez más lejos.

* Esta circunstancia no es óbice para que los proveedores de maquinaria estén viviendo campañas de gran éxito. Tras años en los que el mercado nacional tenía una demanda mínima, la pasada campaña su fortaleza fue indiscutible. Sirva de ejemplo que las empresas dedicadas a la importación (bien como representantes de un amplio catálogo de marcas o como filiales puramente comerciales de grandes grupos) obtuvieron el pasado ejercicio un incremento de sus ingresos totales del 28%, una cifra que fue posible gracias al buen funcionamiento de los dos negocios que suelen ir asociados a su labor: la venta de equipamiento de procesos y de packaging.

* Se observa cierta fatiga en la inversión en I+D en las dos últimas campañas. Pese a que nunca se han dado cifras especialmente altas, los desembolsos en este tipo de labores han sido siempre una constante. La sensación de que la demanda interna de innovación es baja unida a un mercado internacional cada vez mas competitivo y complejo (con países que están sabiendo combinar muy bien tecnologías de alto valor y precios asequibles) parecen ser la causa detrás de este freno, aunque no está claro si es algo coyuntural o se extenderá en el tiempo.

* Aunque hay muchas estrategias en torno a las innovaciones que se deben de introducir a los equipos, la más importante es la apuesta por mejoras en el consumo energético. En algunos campos, como el termoformado, se trata de un aspecto crítico y busca preferentemente reducir el consumo de energía ligado al proceso de fabricación del envase y empaquetado del producto. El otro campo en el que se siguen introduciendo mejoras es en el aprovechamiento del consumible , lo que en la mayor parte de los casos se consigue mediante estudios personalizados de las necesidades de cada cliente.

* El ejercicio de 2016, que se preveía relativamente plano, se cierra con un fuerte aumento de las ventas de maquinaria de envasado. La campaña se termina, según los datos recabados por Revista Alimarket en su último informe, con una facturación de unos 534 M€ por el mercado de maquinaria para alimentación y 74 M que aportan los proveedores de equipos para la industria de conservas. En esta ocasión, el informe separa ambas categorías debido a que siguen patrones distintos y comprenden equipos de naturaleza completamente diversa.