Nuevos materiales sostenibles, sensores para detectar patógenos y un laboratorio de movilidad inteligente son algunos de los desarrollos que obtendrá el centro tecnológico Itene en 2023 mediante ocho proyectos de I+D financiados por el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace) con fondos FEDER.
Para orientar y validar los resultados de estos desarrollos, el centro colaborará con 27 empresas de los sectores de envase y embalaje, plástico, gestión y tratamiento de residuos, cosmética e higiene, prevención de riesgos, medioambiental, investigación, tecnología, automoción y agroalimentación, así como con el hospital La Fe.
La economía circular es una de las áreas en las que ponen el foco las investigaciones del centro tecnológico dados los requisitos marcados a nivel europeo y nacional. En el nuevo marco legislativo que afecta al sector del packaging destacan la Ley de Residuos y Suelos Contaminados, de abril de 2022, y el Real Decreto de Envases y Residuos de Envases, aprobado en diciembre.
Para facilitar el cumplimiento con la legislación aplicable, el instituto desarrolla materiales compostables con propiedades a medida para envases de verdura fresca, ensalada y platos preparados en el proyecto ‘Compolist’. El packaging alimentario también es una de las aplicaciones a las que se dirige la mejora de propiedades de plásticos compostables en las que el centro tecnológico trabaja en ‘Extrtech Up’, en el que también optimiza las prestaciones de materiales reciclados para botellas de productos de droguería.
En la misma línea se investigan nuevos procesos avanzados de reciclado químico y enzimático de envases de plástico PET en el proyecto ‘Recypet’, así como procesos de descontaminación de papel reciclado y de valorización de residuos orgánicos para aplicaciones de packaging en ‘Valocel’.
Los objetivos de sostenibilidad nacionales y europeos también ponen el foco en el transporte para reducir su impacto ambiental e impulsar la movilidad inteligente. Para contribuir a esta transformación, Itene desarrollará un nuevo laboratorio de movilidad inteligente junto a los institutos tecnológicos IBV, ITE, Aidimme, Aimplas e ITI en el marco del proyecto ‘Imolab’. Este laboratorio contará con instalaciones diferenciadas en los diferentes institutos en las que se podrán probar y validar soluciones innovadoras de movilidad conectada, autónoma, sin emisiones y compartida.
Además, ante la cada vez mayor implantación de los vehículos eléctricos e híbridos, se evalúan los riesgos de rutas marítimas de distribución de mercancías para aumentar la seguridad en el transporte de baterías y optimizar su embalaje en el proyecto ‘Transbatt’.
Seguridad de personas y productos
En otro orden de cosas, el centro tecnológico investiga nuevas soluciones tecnológicas para ayudar a las empresas a garantizar la seguridad de los trabajadores y de los consumidores. Entre ellas, se incluyen una nueva plataforma web para facilitar el diseño de sustancias, nanomateriales y nanoproductos seguros y sostenibles. Estos desarrollos se obtendrán en el proyecto SSbD-CV, en el que también se investigan modelos matemáticos que permitan predecir la toxicidad de nanomateriales y sustancias de origen natural.
Para garantizar la salud humana y la seguridad alimentaria, el centro tecnológico desarrollará en el proyecto ‘Biotsens’ sensores y biosensores que ofrecerán una detección temprana de patógenos y contaminantes en distintas matrices. La identificación de contaminantes como el benceno, el tolueno, el etilbenceno y el xileno o gérmenes que pueden estar presentes en ambientes sanitarios mediante herramientas más rápidas y eficaces ayudará a monitorizar la calidad del aire y a cumplir con la normativa aplicable a diferentes industrias.
Asimismo, los biosensores desarrollados permitirán identificar bacterias de E.coli y Listeria monocytogenes en alimentos y superficies que puedan entrar en contacto con ellos, contribuyendo a garantizar la seguridad de los productos y sus consumidores.