Como señalamos en el artículo sobre SCRAPs ( (Sistemas Colectivos de Responsabilidad Ampliada del Productor) publicado en la revista Alimarket de mayo-2025, "uno de los principales desafíos de la nueva RAP tiene que ver con el establecimiento en España de un Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR) para envases de plástico, briks y latas, en un periodo de dos años".
Para abordar este importante desafío, el SCRAP de envases comerciales e industriales Implica ha presentado oficialmente su primer Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR) colectivo y abierto, desarrollado en colaboración con Ecophir Recicla, una consultora creada para ofrecer soluciones y respuestas a todos los agentes económicos afectados por la nueva RAP (Responsabilidad Ampliada del Productor) e integrada en el grupo empresarial especializado en palets de madera Jané Morraja.
Las dos entidades, Ecophir e Implica, ya anunciaron un primer acuerdo de colaboración para promover la gestión de los envases comerciales e industriales reutilizables de tipo palet de forma eficiente y sostenible el pasado verano.
Un proyecto apoyado en tres pilares
Para Laura Sanz de Siria, coordinadora general de Implica, el proyecto de SDDR "representa un esfuerzo conjunto por avanzar hacia un modelo más respetuoso con el medio ambiente y responde directamente a tres objetivos fundamentales: cumplir con los objetivos establecidos por la normativa actual sobre envases, tanto en el RD 1055/2022 (RDERE) como en el Reglamento Europeo 2025/40 (PPWR); ahorrar costes operativos a través de la reutilización de envases, y avanzar hacia un modelo más sostenible, eficiente y alineado con los principios de la economía circular”.
El SDDR promovido por Implica, que al cierre del mencionado artículo reportaba en torno a 1.100 empresas adheridas, propone que envases reutilizables, que anteriormente se utilizaban como si fueran de un solo uso, puedan ahora compartirse entre las empresas adheridas al SCRAP. De este modo, se establece un circuito abierto de traspaso de la propiedad del envase entre estas empresas y sus clientes, lo que permite alargar considerablemente la vida útil de los envases que forman parte del SDDR.
Pablo Mariñas, director general de Ecophir, destacó: “Los servicios ofrecidos en este proyecto incluyen el diseño y la gestión del propio SDDR, la trazabilidad del ciclo de vida de los envases reutilizables y la gestión de los depósitos. También es posible gestionar la recuperación de los envases vacíos en los poseedores finales para su retorno al productor, siempre de forma flexible y respetando la gestión ya existente. Todo ello se gestiona a través de Ecophir APP, herramienta que controla la gestión y la trazabilidad de los envases reutilizables durante todo su ciclo de vida.”
Obligaciones del SDDR
Para implantar un SDDR, además, se deben cumplir varias obligaciones marcadas por el RDERE, entre las cuales destacan la de cobrar a sus clientes, hasta el consumidor final y en concepto de depósito, una cantidad por cada unidad de envase que sea objeto de transacción y la de aceptar la devolución o retorno de los envases usados cuyo tipo, formato o marca comercialicen, devolviendo la misma cantidad que haya correspondido cobrar, asegurando con ello la trazabilidad de los mismos.
Debido a estas obligaciones, en el SDDR propuesto, el productor de producto transfiere la titularidad del envase reutilizable al cliente y cobra un depósito suficiente y necesario para garantizar el retorno de este envase en el sistema.
