El antiguo complejo hotelero y de reuniones de lujo 'Rey Juan Carlos I', de Barcelona, se denominará finalmente, bajo gestión de Meliá Hotels International , como 'Torre Melina, a Gran Meliá Hotel' (5E-391 habitaciones). El operador había anunciado inicialmente que lo iba a llamar 'Gran Meliá Miranda de Pedralbes', pero ha decidido renombrarlo a tres meses de su apertura, si bien mantendrá la marca 'Gran Meliá' con la que funcionará. La fecha prevista de apertura del 'Gran Meliá Torre Melina', que hace referencia a la Torre Melina, actualmente un parque de uso exclusivo de los clientes, está fijada para el próximo mes de enero. El cambio de denominación pretende "rendir tributo a la herencia histórica y patrimonial del complejo, bautizando al hotel como 'Torre Melina', en honor a la antigua masía del mismo nombre, que data del siglo XII, y en cuyos terrenos se encuentra enclavado el hotel", tal como explica el grupo. Asimismo, añade que "refleja el compromiso de la compañía para ser un miembro activo y responsable con la comunidad local, así como su vocación de preservar y celebrar la herencia de los icónicos jardines que rodean la propiedad. De hecho, el hotel conserva con orgullo fragmentos de los jardines modernistas, que ahora son testimonio de su belleza atemporal".

Tras una profunda renovación valorada en 40 M€ y a cargo de Tyrus Capital, que ahora controla la titular de la concesión y explotadora Barcelona Project's, el hotel volverá a abrir sus puertas "ofreciendo una experiencia de alojamiento de lujo en su 391 habitaciones y suites, además de una extraordinaria oferta de servicios e instalaciones, que incluyen 18 salas para eventos interiores y exteriores, varias piscinas y las mejores experiencias de bienestar, entre otros". Además, contará con "una propuesta gastronómica de primer nivel" de la que se han avanzado los dos primeros acuerdos, que se complementarán con otros proyectos anunciados próximamente. Los dos socios que "aportarán su creatividad e innovación para definir una experiencia culinaria única" son ERRE de Errechu y un jazz club de la mano de Erik Lorincz. Dirigido por Íñigo Urrechu, ERRE es "un asador que cuida al máximo la elección de las materias primas, dando prioridad a las verduras ecológicas de temporada, los pescados salvajes y las carnes nacionales e internacionales más destacadas". El restaurante estará ubicado en el lobby del hotel y disfrutará, además, de una amplia carta con más de 200 vinos. Por último, Erik Lorincz, "uno de los mixólogos con más talento y reconocimiento del sector -ganador del Premio al Mejor Bartender del Año y creador del Kwänt Restaurant de Londres- será el encargado de poner la nota de creatividad en la coctelería del hotel". Con más de 20 años de experiencia, ahora trae sus sabores y creaciones a Barcelona.

Previamente, a principios de este mismo mes de octubre, ya ha abierto el Palau de Congressos de Catalunya, que forma parte del complejo hotelero. "Este espacio", explican desde Meliá, "tiene un papel esencial en el reposicionamiento de todo el complejo, ya que supone un complemento fundamental del hotel como infraestructura clave para atraer la creciente demanda del segmento MICE que experimenta la ciudad". Con mejoras en sus instalaciones y nuevo equipamiento tecnológico, el Palau cuenta con 39 salones de diversos tamaños y modulables, un auditorio con capacidad para más de 2.000 personas, múltiples espacios multiuso interiores y exteriores, así como un área de exposiciones de más de 4.000 m2.