Henkel continúa dando pasos en materia de sostenibilidad con progresos en todos los eslabones de su cadena, tal y como recoge su 32º Informe de Sostenibilidad, en el que señala sus progresos en la aplicación de su estrategia en este segmento, en el que resalta, por ejemplo, que para 2025 todos los envases estarán diseñados para su reciclaje y reutilización.

La multinacional publicó el año pasado su Marco de Objetivos de Sostenibilidad 2030, en el que detalla su plan estratégico en materia de sostenibilidad. Henkel hizo progresos por la protección del clima en 2022, reduciendo sus emisiones de CO2 en un 55% por tonelada métrica de producto (en comparación con el año 2010). Además, ha aumentado la proporción de electricidad procedente de fuentes renovables en un 70%. Para 2030, tiene como objetivo alcanzar una huella de carbono positiva para el clima en su producción mundial y que el 100% de la electricidad que usan sus centros de producción provenga de fuentes renovables.

Además, el pasado diciembre firmó un contrato de diez años con el grupo Ignis para el suministro de energía renovable en formato VPPA, que incluye la puesta en marcha de dos nuevas plantas de energía solar en España.

Con el fin de reducir los residuos y su impacto negativo en el medio ambiente, Henkel trabaja para evitar y reducir el uso de materiales de embalaje, especialmente el de aquellos destinados a bienes de consumo. Así, en 2022, la proporción de los productos con envases diseñados para su reciclaje y reutilización aumentó en un 87%.

También quiere incrementar la proporción de plástico reciclado en sus envases de bienes de consumo. En 2022, esta proporción era de alrededor del 16%. Además, para 2025, pretende llegar a reducir su volumen de residuos en un 50% por t de producto, respecto a 2010. En 2022, la empres aregistró una reducción del 43%. Para 2030, se espera conseguir un uso completamente circular de sus residuos de producción.

Henkel también avanzó el año pasado en la protección de sus recursos naturales. Como parte de su gestión de proveedores, la empresa trabaja con aquellos que puedan garantizar la adquisición de materias primas sostenibles. En 2022, por ejemplo, la empresa aumentó la tasa de trazabilidad de las materias primas a base de palma hasta la fábrica del 84% en el año anterior hasta el 89%.

Henkel amplió aún más su compromiso social después de los acontecimientos geopolíticos que tuvieron lugar a lo largo del año pasado. Para 2030, la empresa se propuso mejorar la vida de 30 millones de personas en todo el mundo a través de distintos proyectos sociales y donaciones. Además, para promover la igualdad de oportunidades, quiere seguir aumentando el porcentaje de mujeres en puestos directivos y persigue el objetivo de alcanzar la paridad de género en todos los niveles directivos para 2025.

La fábrica de Henkel Ibérica situada en la localidad de Montornés del Vallés (Barcelona), con más de 50 años de actividad, produce más de 200.000 t de detergentes y adhesivos, empleando a más de 500 personas y exportando a más de 60 países.