El empresario Carlos Serrano ha tomado posesión como presidente de la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice), en la Junta General que ha celebrado en Madrid la principal organización empresarial de la industria cárnica de ámbito nacional, que agrupa a cerca de 800 empresas distribuidas por toda la geografía española, incluyendo mataderos de porcino, vacuno y ovino, fábricas de elaborados, jamón curado y productos ibéricos. Carlos Serrano, director general de Cárnicas Serrano , de Paterna (Valencia), recoge el testigo de Generoso García, de Ibéricos Torreón Salamanca , empresario salmantino que ha presidido la organización en los últimos ocho años y que continuará como vicepresidente y miembro del comité ejecutivo. Este último se completa con Luis Fernando Rodríguez, de M.R.M. 2 , como tesorero, y Alberto Jiménez, de Embutidos Goikoa , como censor.
El nuevo presidente ha destacado que los principales retos son potenciar la internacionalización y la actividad exportadora de las empresa; la profundización en la vertebración sectorial a través de las organizaciones interprofesionales de las que forma parte (Interporc, Asici, Interovic); y la puest en marcha de iniciativas que faciliten la participación activa de las empresas españolas en proyectos de I+D+i y la captación de los fondos de innovación dentro del 'Horizonte 2020'.
Análisis del sector
En la Junta General de Anice, los asistentes han analizado y debatido todos los temas que inciden de forma relevante en la actividad de las industrias, tanto en los aspectos normativos, fiscales e impositivos y laborales, como en las relaciones comerciales y el comercio exterior, entre otros. Por un lado, se mostró preocupación por el sentido que pueda llevar la reforma fiscal en la que está trabajando el gobierno, así como otras normativas muy negativas para el sector, como las referidas a la cogeneración o el nuevo impuesto sobre gases fluorados. Los empresarios manifestaron que el sector no puede seguir acumulando mayores cargas sobre su actividad y que una eventual subida de impuestos puede amenazar seriamente el consumo, la viabilidad de las industrias de la carne y dificultar de forma preocupante la recuperación económica.
En el terreno laboral, se revisó el estado de situación de la regulación colectiva sectorial, cuyo convenio concluye este mismo año, analizando los puntos de mayor interés para las empresas, así como la necesidad de dar solución a aspectos pendientes como el plus de ruido. Se informó también de la aplicación de la esperada 'Ley de la Cadena Alimentaria', necesaria para que se logre definitivamente superar los desequilibrios en las relaciones comerciales y corregir las prácticas no deseadas entre las industrias y sus clientes de la distribución.
Asimismo, el encuentro analizó la importancia estratégica del comercio exterior, su evolución, y la urgente necesidad de contar con unas estructuras administrativas unificadas y adaptadas a lo que requiere la compleja actividad del comercio internacional. En este sentido, se señaló como necesario que las competencias de la Administración central del Estado en materia de comercio exterior de productos de origen animal se ejerzan desde el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, porque la actual división competencial entre Sanidad y Agricultura sigue causando muchos problemas y obstáculos en las exportaciones, creando graves problemas y pérdida de competitividad a nuestros exportadores.
Igualmente se informó de tres temas de singular importancia para la industrias, como son la evolución de la normativa de etiquetado de origen de las carnes, el estado de situación de la reintroducción del uso de las harinas cárnicas para la alimentación animal de no rumiantes, y, en tercer lugar, la reforma de la inspección veterinaria de la carne en mataderos, que entrará en vigor el próximo mes de junio, basada en la inspección visual, así como la reducción de los controles de triquina.
