La cadena de supermercados Lidl inaugurará este mes de febrero cuatro nuevas tiendas en Alicante, Jerez de la Frontera (Cádiz), Málaga y Quintanar de la Orden (Toledo), y estrenará un nuevo punto de venta en Huércal-Overa (Almería), que sustituirá al ubicado en el mismo emplazamiento. Estas nuevas actuaciones, que supondrán una inversión de 25 M€, se unen a la inauguración materializada el pasado mes de enero en Alcalá de Henares (Madrid). En total, entre enero y febrero, la cadena ha sumado 7.300 m2 a su red, fruto de aperturas y la citada reforma.

Con este programa, la compañía finalizará su ejercicio fiscal 2022, el próximo 28 de febrero de 2023, con una red de 668 supermercados en España, que aglutinarán 781.570 m2 de superficie comercial. A nivel de facturación, la firma alemana podría situar sus ingresos por encima de los 5.600 M€, tras cerrar 2021 con ventas netas de 5.144 M€ (+6,6%).

La cadena de supermercados continúa desplegando de este modo su plan de expansión nacional, al que prevé dar continuidad con la apertura de más tiendas y la ampliación de sus actuales infraestructuras logísticas. Este año, la firma alemana mantendrá un número similar de aperturas y de inversión, que en 2022 ascendió a 350 M€ (353 M en 2021), en consonancia con los ejercicios anteriores. Todo ello se incluye dentro de un capítulo inversor, que hasta 2024, englobará una partida total de 1.500 M€.

Aparte de acelerar su expansión, gran parte de este desembolso irá destinado a ampliar su capacidad logística, con vistas a alcanzar una infraestructura de 15 plataformas de suministro. En la actualidad, Lidl está construyendo una nueva nave en Escúzar (Granada) y realizando tareas previas al inicio de la construcción de los futuros almacenes de Parla (Madrid) y Martorell (Barcelona). Además, ha adquirido una parcela destinada a otro nuevo proyecto logístico en Constantí (Tarragona).