Grupo TGT alcanzó una facturación de 456 M€ durante 2022, lo que supone un crecimiento del 28% respecto a 2021. También fue positivo el resultado bruto de explotación que se elevó hasta los 2 M€ tras dos años de ebitda negativo debido al impacto del Covid. Antes estos números, el director general de la compañía, Sergi Ballell, se muestra "optimista" respecto las previsiones para 2023, aunque también "prudente por la incierta situación de la economía global". Ballell se ha marcado como objetivo principal para este año "consolidar este crecimiento" y "sacar rendimiento a las inversiones realizadas en los últimos cinco años", que han permitido al grupo reforzar su músculo industrial.
Entre 2019 y 2022, el grupo catalán con sede en Viladecans ha invertido 86 M€ en aumentar su capacidad logística y productiva mediante la apertura de una planta de transformación de queso y plataforma logística en Guadalajara, la ampliación de la planta de Murcia, la adquisición de dos fábricas en Galicia y la apertura de una fábrica en Portugal, entre otras inversiones. En la actualidad, TGT dispone de 11 plantas en nuestro país y una plantilla de cerca de mil empleados.
En el año de su 60 aniversario, el grupo asegura que seguirá trabajando para consolidarse como "el principal referente de su categoría": "Somos los únicos con el approach global de toda la categoría de quesos y trabajamos para estar en todas las neveras de España. Queremos que cuando el consumidor vea nuestros productos piense que somos el referente de quesos de calidad", subraya Ballell.
Apuesta internacional
TGT dobló sus ventas en el mercado internacional durante 2022 y el objetivo para este año es volver a doblarlas: "Somos el fabricante ideal para distribuidores internacionales, ya que con un solo grupo pueden abarcar las principales denominaciones de origen españolas que son muy apreciadas en mercados como Estados Unidos y el Norte de África", asegura el directivo. En la actualidad, la empresa catalana cuenta con filiales en Panamá, México, Uruguay y Portugal.
